La dictadura estalinista
La dictadura de Stalin se caracterizó por:
-El culto a la personalidad del líder, que era considerado infalible y gozaba de poder absoluto.
-La represión y eliminación de toda disidencia. Stalin acabó con cualquier oposición en el seno del PCUS (Partido Comunista de la Unión Soviética) y colocó en la dirección del partido a aquellas personas que consideró fieles a él y, aún así, las mantuvo bajo férrea vigilancia.
En 1.936 se adoptó una constitución que de hecho legalizaba la dictadura. La URSS quedó integrada por once repúblicas y veinte regiones autónomas. Aunque en teoría reconocía el sufragio universal a los hombres y mujeres mayores de 18 años, solo los miembros del Partido Comunista podía ser candidatos y jamás se celebraron unas elecciones libres.
Progresivamente los cargos del Partido Comunista fueron formando una burocracia privilegiada, la nomenklatura, que gozaba de un nivel de vida y un poder muy superiores a los del resto de la población.
El terror
Lo más notorio de la política estalinista fue la práctica del terror para lograr la sumisión de la sociedad. En 1.934 Stalin creó una nueva policía política la NKVD (Comité del Pueblo para Asuntos Internos), que fue el instrumento ejecutor de la represión.
La política del terror se aplicó por medio de los programas de purgas, que alcanzaron al PCUS, al ejército y al conjunto de la sociedad. El punto más álgido de las purgas tuvo lugar entre 1.936 y 1.939 con los procesos de Moscú. Sin ninguna contemplación se eliminó a los opositores de izquierda y de derecha. Hasta los antiguos rivales de Stalin, que ya casi no tenían poder en el partido, como Kamenev, Zinoviev, Bujarín y otros miembros de la vieja guardia bolchevique, fueron condenados a muerte y ejecutados. En el ejército el caso más destacado fue la ejecución del héroe de la guerra civil, el mariscal Tujachevski. Según las cifras oficiales, entre 1.937 y 1.938 fueron ejecutadas unas 700.000 personas.
Pero no solo los diferentes aparatos de poder sufrieron la represión: se calcula que unos ocho millones de personas fueron enviadas a los campos de trabajo forzados, conocidos como los gulag, con unas condiciones de vida atroces. Muchos murieron allí.
A partir de 1.939 la violencia de las purgas disminuyó, aunque la represión continuó durante todo el período de gobierno de Stalin. El sistema del terror generó una dinámica de delación y miedo en el seno de la sociedad soviética. Millones de personas sufrieron la persecución policial por falsas denuncias, muy a menudo provocadas por rivalidades personales.
La colectivización de la agricultura
Entre 1.929 y 1.933 tuvo lugar otro de los grandes dramas de la historia soviética: la colectivización. El gobierno ordenó acabar con la propiedad privada en el campo y forzar a los campesinos a integrarse en granjas colectivas (koljoses) o en granjas del Estado (sovjoses).
La desmoralización y la mala organización provocaron que muchas granjas resultaran ineficaces. En 1.932 se produjo otra gran hambruna con millones de víctimas. El régimen culpó a los campesinos propietarios, los kulaks, a los que se acusó de sabotear la colectivización, y desató una brutal represión contra ellos. Entre cinco y diez millones fueron deportados o asesinados.
Si esto es cierto, ¿cómo podéis apoyar a un asesino así?
La dictadura de Stalin se caracterizó por:
-El culto a la personalidad del líder, que era considerado infalible y gozaba de poder absoluto.
-La represión y eliminación de toda disidencia. Stalin acabó con cualquier oposición en el seno del PCUS (Partido Comunista de la Unión Soviética) y colocó en la dirección del partido a aquellas personas que consideró fieles a él y, aún así, las mantuvo bajo férrea vigilancia.
En 1.936 se adoptó una constitución que de hecho legalizaba la dictadura. La URSS quedó integrada por once repúblicas y veinte regiones autónomas. Aunque en teoría reconocía el sufragio universal a los hombres y mujeres mayores de 18 años, solo los miembros del Partido Comunista podía ser candidatos y jamás se celebraron unas elecciones libres.
Progresivamente los cargos del Partido Comunista fueron formando una burocracia privilegiada, la nomenklatura, que gozaba de un nivel de vida y un poder muy superiores a los del resto de la población.
El terror
Lo más notorio de la política estalinista fue la práctica del terror para lograr la sumisión de la sociedad. En 1.934 Stalin creó una nueva policía política la NKVD (Comité del Pueblo para Asuntos Internos), que fue el instrumento ejecutor de la represión.
La política del terror se aplicó por medio de los programas de purgas, que alcanzaron al PCUS, al ejército y al conjunto de la sociedad. El punto más álgido de las purgas tuvo lugar entre 1.936 y 1.939 con los procesos de Moscú. Sin ninguna contemplación se eliminó a los opositores de izquierda y de derecha. Hasta los antiguos rivales de Stalin, que ya casi no tenían poder en el partido, como Kamenev, Zinoviev, Bujarín y otros miembros de la vieja guardia bolchevique, fueron condenados a muerte y ejecutados. En el ejército el caso más destacado fue la ejecución del héroe de la guerra civil, el mariscal Tujachevski. Según las cifras oficiales, entre 1.937 y 1.938 fueron ejecutadas unas 700.000 personas.
Pero no solo los diferentes aparatos de poder sufrieron la represión: se calcula que unos ocho millones de personas fueron enviadas a los campos de trabajo forzados, conocidos como los gulag, con unas condiciones de vida atroces. Muchos murieron allí.
A partir de 1.939 la violencia de las purgas disminuyó, aunque la represión continuó durante todo el período de gobierno de Stalin. El sistema del terror generó una dinámica de delación y miedo en el seno de la sociedad soviética. Millones de personas sufrieron la persecución policial por falsas denuncias, muy a menudo provocadas por rivalidades personales.
La colectivización de la agricultura
Entre 1.929 y 1.933 tuvo lugar otro de los grandes dramas de la historia soviética: la colectivización. El gobierno ordenó acabar con la propiedad privada en el campo y forzar a los campesinos a integrarse en granjas colectivas (koljoses) o en granjas del Estado (sovjoses).
La desmoralización y la mala organización provocaron que muchas granjas resultaran ineficaces. En 1.932 se produjo otra gran hambruna con millones de víctimas. El régimen culpó a los campesinos propietarios, los kulaks, a los que se acusó de sabotear la colectivización, y desató una brutal represión contra ellos. Entre cinco y diez millones fueron deportados o asesinados.
Si esto es cierto, ¿cómo podéis apoyar a un asesino así?