Jordi de Terrassa escribió:Trabajadores también existen de diferentes clases sociales, independientemente de su número pueden ser esclavos, siervos, proletarios, incluso existen trabajadores propietarios de medios de producción, pero no por ello se convierten en burgueses.
Yo no se a que viene esto,ni recuerdo haber escrito que no existe trabajadores no proletarios.
La producción y el consumo de drogas si alienan, si es malo, si es injusto,mas alla de discursos basados en datos y planteamientos teoricos, lo sacas por la propia experiencia si vives en barrio populares, especialmente si haces vida social en sus calles desde la infancia.
Desde el principio he defendido legalizar la marihuana terapeutica.
marsupial escribió:De ahí entiendo que la FAC apuesta por el autocultivo, individual o colectivo, para el autoconsumo. En el caso del autocultivo colectivo, la FAC apuesta por los CSC, asociaciones sin ánimo de lucro. En ningún lugar aparece que la FAC apueste por el modelo de negocio de los coffe shops holandeses u otro similar. Tampoco apuesta por el monopolio estatal o que el Estado produzca y distribuya cannabis salvo, posiblemente, en el caso terapéutico.
Ese es el minimo que piden,pero su practica demuestra que defiende lo maximo legalizacion absoluta, como se ve en otras partes del documento que citas:
La FAC consiguió que en octubre de 2007 Izquierda Unida presentara en el parlamento español una Proposición no de ley para la modificación de la Ley Orgánica 1/1992 del 21 de febrero de seguridad ciudadana, con la intención de derogar el artículo 25 y el apartado 2 del articulo 28, por los que se castiga con multas de 300 a 30.000 € la tenencia y consumo en lugares públicos. La proposición no de Ley no tuvo apoyo de ninguno de los dos partidos políticos mayoritarios en el parlamento, por lo que no prosperó.
Con posterioridad a esta iniciativa, la FAC ha continuado con los contactos políticos iniciados a raíz de la presentación de las firmas. Cabe destacar la reunión que se mantuvo con la ejecutiva del PSOE, concretamente con su secretario de movimientos sociales, Pedro Zerolo, y con el responsable del grupo de trabajo sobre drogas, Domingo Comas, a quienes se expusieron en detalle nuestras reivindicaciones, sin haber obtenido aún respuesta satisfactoria.
Comparecencia en octubre de 2006 del presidente de la FAC, Martín Barriuso, en la ponencia para el Estudio de los Efectos Nocivos de las Drogas en los Jóvenes, de la Comisión Mixta para el Estudio del Problema de las Drogas del Parlamento Español. Tuvo amplia repercusión mediática.
La FAC participa activamente en el Grupo de Oñati desde su fundación, un grupo de trabajo de profesionales y grupos diversos relacionados con el cannabis y su consumo de la CAPV y Navarra, creado en el año 2003 en el marco de los seminarios que sobre este tema organizó el Instituto Internacional de Sociología Jurídica. Su objetivo es encontrar alternativas viables a las actuales políticas prohibicionistas de drogas.
En el año 2004 se celebró el primer encuentro de Oñati, que agrupó a mas de 30 profesionales de diferentes campos (educación, prevención, sanidad, asistencial, derecho, información) y representantes de diversas asociaciones de usuarios. En este evento Ganjazz Art Club presentó la ponencia “Proyecto de viabilidad y normalización de espacios para usuarios de cannabis en Euskadi", donde se analizarón las bases de funcionamiento de un club social de cannabis desde la óptica de la reducción de riesgos.
En el año 2005 presentaron públicamente el manifiesto “Bases para un consenso social sobre el fenómeno del cannabis, en clave de normalización".
Ese mismo año organizaron unas jornadas sobre regulación del cannabis en la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación de la UPV en Donostia. El presidente de la FAC presentó en dicha jornada una ponencia que incluía una propuesta de regulación legal del cannabis en el estado español.
En 2006 organizaron el la “Evaluación de políticas y programas relacionadas con el fenómeno social de las drogas en la Unión Europea" celebrada en el Instituto Internacional de Sociología Jurídica en Oñati, en el que participó una representación de la FAC.
Unos de los motivos que se utilizan en las instituciones para su legalizacion es el impacto economico en las economias locales.
cannabis: la planta de los mil usos
Creo que debemos ampliar la mirada y luchar por la legalización del cannabis
Estefanía Torres - Eurodiputada de Podemos
01/05/2017 - 19:58h
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Un documental explica "el porqué" de la legalización del cannabis en Uruguay
Planta de cannabis. EFE
En tiempos inmemoriales, cultivar cáñamo (Cannabis sativa) formaba parte del corazón productivo de muchos países, donde se plantaba con la misma naturalidad que el algodón o las hortalizas. Fue una de las primeras plantas utilizadas para extraer fibra y era reconocida por su resistencia en la fabricación de cuerdas, papel y aceite para lámparas.
De la planta del cannabis se dice que es la planta de los mil usos. Es un poco como el cerdo, del que se aprovechan hasta los andares. En España incluso se observan sus hojas en las banderas de algunos municipios (como Santa Cruz de los Cáñamos, en Ciudad Real, o Cañamares, en Cuenca) debido a la vital importancia que la planta suponía para la economía local. La prohibición del cultivo del cannabis tiene su origen en Estados Unidos y está llena de prejuicios raciales, desconocimiento y también intereses económicos de grandes empresas.
Se dice que fueron los mexicanos quienes, a principios del s.XX, llevaron la costumbre de fumar cannabis a Estados Unidos, desatando su prohibición. "Todos los mexicanos están locos y es esta hierba la que los vuelve locos", dijo un senador de Texas en aquella época. Han pasado más de cien años. Hoy conocemos los beneficios del uso medicinal del cannabis: glaucoma, autismo, quimioterapia, parkinson, reducción del riesgo de obesidad y diabetes; también sirve para algunos tipos de epilepsia e incluso mitiga el dolor menstrual, ayuda en procesos de ansiedad y depresión, etc. Debemos seguir investigando en esta línea para descubrir todo lo que nos puede dar, porque es profundamente triste que despojen irracionalmente a los pueblos de la capacidad de conocer y reconocer todos los atributos que nos regala la tierra.
La normalización del cultivo y consumo del cannabis ha ido aumentando en los últimos años en España, demostrando que la sociedad, también en este tema, va por delante de los gobernantes. Por otra parte, se están dando sendos procesos de regularización del uso y tenencia del cannabis en distintos países del mundo y de Europa. Uno de los más recientes ha sido Portugal, donde esperan que la liberalización de su cultivo suponga un impulso para el deprimido sector agrario.
Necesitamos hacer desaparecer los impedimentos legales sobre la planta que imposibilitan que la investigación básica y clínica avancen. Pero no es sólo de usos medicinales de lo que hablamos. De las semillas del cannabis, por ejemplo, ricas proteínas, omega 3 y omega 6, se puede obtener aceite comestible, harina, leche, pan, cosméticos, jabón, lubricantes y biocombustibles. Por todo esto es necesario un enfoque integral sobre su cultivo. Estoy convencida de la necesidad de ir más allá de la legalización por prescripción médica, ya que el cannabis podría suponer un impulso económico para el mundo rural en términos de producción ecológica, comercialización y consumo de proximidad.
Intentando abrir camino en esta dirección, la semana pasada, desde Podemos anunciamos el debate que celebraremos en el Parlamento Europeo sobre la regularización del cannabis en Europa. Aunque las reacciones fueron positivas, la mayoría se referían al cannabis única y exclusivamente en sus facetas terapéutica o de ocio. Pocas respuestas iban más allá de ambas concepciones. Creo que esto pone de manifiesto cómo se ha demonizado el cannabis desde hace mucho tiempo y el desconocimiento en general que hay acerca de la marihuana (el término que suele usarse para hablar de las variedades del cannabis que sirven para fumar).
Creo que debemos ampliar la mirada y luchar por la legalización del cannabis simplemente como lo que es: una planta. Abrir este debate es reconciliarnos con la naturaleza, con nuestros antepasados y con la vida. Porque la tierra es fuente de vida y observarla, mimarla y estudiarla sin estigmas para saber sacar lo más provechoso de ella es, desde luego, el mayor legado que podemos dejar a quienes vengan detrás. Escribamos el futuro sin ataduras y con responsabilidad.
01/05/2017 - 19:58h
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