Un saludo puño en alto. Gloria eterna para nuestra combatiente fallecida.
Queridos socios, amigos y colaboradores,
Nuestra compañera Remedios Montero falleció ayer 24 de octubre de 2010.
Ha muerto Remedios Montero, guerrillera antifranquista
Reme, nuestra compañera de combates contra la impunidad, luchadora
consecuente por la libertad y camarada comprometida con el legado de
nuestra memoria colectiva, nació el 17 de agosto de 1926 y se nos ha ido
el 24 de octubre de 2010 sin haber podido contemplar el reconocimiento
jurídico de los guerrilleros antifranquistas.
El sistema democrático de este país tiene otra deuda pendiente, la misma
que mantiene con los guerrilleros que han fallecido en estos últimos años,
con los que murieron en combate, y con los que aún viven sin ver
reconocidos sus derechos. Y todo ello en un país en el que se supone que
el sistema reconoce que todos los ciudadanos somos iguales y tenemos los
mismos derechos.
La vida de Reme, Celia en la guerrilla, como el título de su libro de
memorias, fue muy dura, tanto como la de los compañeros que formaron el
ejército guerrillero antifranquista en los represivos años de posguerra.
Ella, compañera del guerrillero Florián García "Grande", fallecido el 17
de abril del año pasado, se incorporó muy joven al combate junto a
Esperanza Martínez "Sole". Aprendió con los guerrilleros de la AGLA todo
lo que una persona debe saber para representar la justicia y los valores
republicanos. En la guerrilla, junto a las tres hermanas Esperanza, Amada
y Angelina, fue la compañera que, truncada su adolescencia y juventud,
represento la lucha de las mujeres republicanas, el espacio necesario en
el combate, la igualdad de fuerza y de ánimo en la defensa de las ideas de
libertad, y así, fue capturada. Así el poderoso y criminal adversario
franquista consiguió encarcelar a las cuatro, cuando acometían misiones
importantes, misiones de lucha, sacar grupos de guerrilleros por el paso
de fronteras, cuando ya la guerrilla, desprotegida, desamparada y
abandonada a su suerte, se deshacía y con ella la última esperanza de
restaurar al gobierno legítimo de la segunda república. Reme y sus
compañeros fueron el último eslabón de una cadena que, de haber sido
factible su heróica lucha, habría cambiado el sentimiento de valores y
dignidad de este país.
Un consejo de guerra, después de su paso por cuarteles y comisarias en los
que el trato bestial fue permanente, la condenó primero a la cárcel de
Valencia y después al penal de Alcalá de Henares durante cerca de nueve
años. Allí compartió penalidades, esfuerzos y esperanzas con Espe y Amada,
guerrilleras que portan el testigo y la memoria que nos ha dejado Reme.
Reme, compañera noble, fiel, tus compañeras y compañeros seguiremos este
justo combate por la memoria democrática hasta el fin, hasta que en el
Congreso de los Diputados sientan que su conciencia haga imposible su
sueño, su descanso y su existencia y perciban la injusticia de querer
borrar de la memoria la justicia de vuestra causa.
Gracias Reme por tu ejemplo, por tu constancia y por tu lucha.
Te tendremos siempre en el corazón y en el combate por la memoria colectiva.
Dolores Cabra
Secretaria General de AGE
Queridos socios, amigos y colaboradores,
Nuestra compañera Remedios Montero falleció ayer 24 de octubre de 2010.
Ha muerto Remedios Montero, guerrillera antifranquista
Reme, nuestra compañera de combates contra la impunidad, luchadora
consecuente por la libertad y camarada comprometida con el legado de
nuestra memoria colectiva, nació el 17 de agosto de 1926 y se nos ha ido
el 24 de octubre de 2010 sin haber podido contemplar el reconocimiento
jurídico de los guerrilleros antifranquistas.
El sistema democrático de este país tiene otra deuda pendiente, la misma
que mantiene con los guerrilleros que han fallecido en estos últimos años,
con los que murieron en combate, y con los que aún viven sin ver
reconocidos sus derechos. Y todo ello en un país en el que se supone que
el sistema reconoce que todos los ciudadanos somos iguales y tenemos los
mismos derechos.
La vida de Reme, Celia en la guerrilla, como el título de su libro de
memorias, fue muy dura, tanto como la de los compañeros que formaron el
ejército guerrillero antifranquista en los represivos años de posguerra.
Ella, compañera del guerrillero Florián García "Grande", fallecido el 17
de abril del año pasado, se incorporó muy joven al combate junto a
Esperanza Martínez "Sole". Aprendió con los guerrilleros de la AGLA todo
lo que una persona debe saber para representar la justicia y los valores
republicanos. En la guerrilla, junto a las tres hermanas Esperanza, Amada
y Angelina, fue la compañera que, truncada su adolescencia y juventud,
represento la lucha de las mujeres republicanas, el espacio necesario en
el combate, la igualdad de fuerza y de ánimo en la defensa de las ideas de
libertad, y así, fue capturada. Así el poderoso y criminal adversario
franquista consiguió encarcelar a las cuatro, cuando acometían misiones
importantes, misiones de lucha, sacar grupos de guerrilleros por el paso
de fronteras, cuando ya la guerrilla, desprotegida, desamparada y
abandonada a su suerte, se deshacía y con ella la última esperanza de
restaurar al gobierno legítimo de la segunda república. Reme y sus
compañeros fueron el último eslabón de una cadena que, de haber sido
factible su heróica lucha, habría cambiado el sentimiento de valores y
dignidad de este país.
Un consejo de guerra, después de su paso por cuarteles y comisarias en los
que el trato bestial fue permanente, la condenó primero a la cárcel de
Valencia y después al penal de Alcalá de Henares durante cerca de nueve
años. Allí compartió penalidades, esfuerzos y esperanzas con Espe y Amada,
guerrilleras que portan el testigo y la memoria que nos ha dejado Reme.
Reme, compañera noble, fiel, tus compañeras y compañeros seguiremos este
justo combate por la memoria democrática hasta el fin, hasta que en el
Congreso de los Diputados sientan que su conciencia haga imposible su
sueño, su descanso y su existencia y perciban la injusticia de querer
borrar de la memoria la justicia de vuestra causa.
Gracias Reme por tu ejemplo, por tu constancia y por tu lucha.
Te tendremos siempre en el corazón y en el combate por la memoria colectiva.
Dolores Cabra
Secretaria General de AGE