verdadyreconciliacion escribió:« el partido comunista chino reconoce resueltamente que el Kuomintang y sus principios son necesarios para la revolución china. Sólo aquellos que no quieren ver la revolución china triunfar pueden ser partidarios de la ruina del Kuomintang. Incluso en el caso de que sea mal dirigido, el partido comunista chino no puede ser partidario de la ruina de su aliado el Kuomintang, por darles placer a nuestros enemigos, los imperialistas y los militaristas».
Pepito.
¿Cuándo dijo eso Stalin? Lo digo más que nada porque el KMT de Sun Yat Sen y el de Chiang Kai Shek son cualitativamente diferentes. Aparte que entre los comunistas chinos no hubo discusión acerca de la colaboración con el KMT hasta que Chiang Kai Shek consumó su traición. Te rogaría que no descontextualizaras las citas. Yo acostumbro a poner links con la fecha y el título de la obra para evitar este tipo de cosas.
Demófilo, siento que no hayas entendido mi frase de calendario, pero me referia al oportunismo de Stalin con los frentes populares, con el Kuomintang, en relación al frente unido, en relación al comintern, que lo que hacía era estropear revoluciones por su hegemonismo.
Pero si el teórico del frente popular es Dimitrov. No es Stalin, que ni siquiera nombra a los frentes populares en sus obras. De hecho, la teoría es la del frente único. El frente popular es una forma particular del frente único. Además, la táctica no es en sí oportunista. Oportunista fue la interpretación que hizo el PC francés, que planteaba hacer todo a través del frente, sin salvaguardar la independencia del Partido. Fue la extensión de esta visión a otros PCs la que hizo fracasar la táctica. Los chinos, en cambio, mantuvieron su independencia y autodecisión. Por eso triunfaron. Pero no por negar el frente, sino por desarrollarlo, combatiendo a los recalcitrantes y atrayéndose a los elementos intermedios.
Exactamente esa no es la parte en la que se pierde el Stalin, es en la transformación cualitativa de una revolución democrática burguesa, a una revolución neodemocrática en la era de la revolución proletaria.
No basta con consignas, hay que imponer el poder nuevo, y eso es cualitativamente distinto. Como dice el dicho salvo el poder todo es ilusión.
Pero si la revolución de nueva democracia es una revolución democrático-burguesa dirigida por la clase obrera en las condiciones de la época del imperialismo y la revolución proletaria. Por eso la revolución democrática es de nuevo tipo. Y no lo digo yo, lo dice Mao en
Sobre la nueva democracia:
Sin embargo, la revolución democrático-burguesa de China experimentó un cambio con el estallido de la Primera Guerra Mundial imperialista en 1919 y el establecimiento de un Estado socialista sobre una sexta parte del globo a consecuencia de la Revolución de Octubre de 1917 en Rusia.
Antes de estos acontecimientos, la revolución democrático-burguesa china pertenecía a la vieja categoría, a la de la revolución democrático-burguesa mundial, y formaba parte de esta revolución.
Después de dichos acontecimientos, la revolución democrático-burguesa china pasó a pertenecer a una nueva categoría de la revolución democrático-burguesa, y el frente del que forma parte es el de la revolución socialista proletaria mundial.
De hecho el "poder nuevo" fue impuesto en las democracias populares (en el Informe Zhdánov se habla de países de Nueva Democracia) de Europa Oriental, ya que en varios de esos países (Rumania, Hungría, Polonia) debido a su atraso la lucha antifascista se mezcló con luchas antifeudales.
“Stalin cometió algunos errores con relación a la revolución china. De él provinieron tanto el aventurerismo de “izquierda” de Wang Ming en la última fase de la Segunda Guerra Civil Revolucionaria, como su oportunismo de derecha en la fase inicial de la Guerra de Resistencia contra el Japón . En el período de la Guerra de Liberación, Stalin comenzó por prohibirnos hacer la revolución afirmando que si estallaba una guerra civil, la nación china se encontraría bajo la amenaza de la ruina. Iniciada la guerra, creyó solo a medias en nuestra fuerza. Al triunfo de la guerra tuvo la sospecha de que la nuestra era una victoria a lo Tito y ejerció, en los años 1949 y 1950, una presión muy grande sobre nosotros”.
Errores que el propio Stalin reconoció. Y eso no lo digo yo, lo dicen los camaradas chinos:
Cuando cometió errores, Stalin pudo hacerse la autocrítica. Por ejemplo, dio algunos malos consejos respecto a la revolución china. Después que ésta triunfó, reconoció sus errores. En el informe pronunciado ante el XVIII Congreso del Partido Comunista (b) de la URSS en 1939, admitió también algunos errores cometidos en la depuración del Partido.
Las Redacciones de Renmin Ribao y Hongqi, "Sobre el problema de Stalin"