¿Dije yo que le Partido Comunista de Albania está dirigiendo las protestas? me parece que estas muy susceptible "sorge" y quizás no lo sepas pero los grupos que no se unieron al Partido Socialista Albanes, operaron desde Italia con el apoyo de los camaradas italianos de la CIPOML. Desconozco si ya han podido regresar a Albania y en que condiciones se encuentran. Pero es un hecho que en 1991 hubo una lucha abierta entre los revisionistas y los comunistas en Albania. Ya para 1997 parte del ejercito no apoyaba al régimen liberal de Sali Berisha y el Partido Socialista de Albania (los revicionistas del PTA) obtenían 92 de los 140 puestos en el parlamento. Nada mal para ser los descendientes del "asesino y criminal" PTA. Estos revisionistas que tuvieron la decencia y la honestidad de renombrarse "socialdemócratas" (no como la mayoría de los revisionistas) han sido un fiasco como no podía ser de otra forma y ahora se están viendo los resultados: el pueblo albanes sigue desbordando las opciones socialdemócratas y haciendo su experiencia. Cuanto de esto es fruto de las enseñanzas del PTA es difícil saberlo pero lo que es indudable es que en Albania no existió una "época oscura" luego de la derrota del los comunistas en 1991 y en pocos años el pueblo estaba luchando de nuevo con las armas en la mano. Sin duda los comunistas albaneses han sido muy golpeados y les llevará tiempo recuperarse, si hasta Haxhi Lleshi fue encarcelado imagínense lo que fue para los demás.
Les dejo una carta que el camarada Hysni Milloshi secretario general del Partido Comunista Albanés enviaba a Ludo Martens ante la inauguración del Seminario de Bruselas en 1997:
Querido camarada Ludo Martens,
Estoy al tanto del Seminario internacional que se desarrolla en Bruselas desde hace algunos años, en el cuadro de la unificación del movimiento comunista, con la participación de una cantidad considerable de partidos comunistas del mundo entero y de tendencias diversas. Recibí con placer la invitación del Partido del Trabajo de Bélgica (PTB) y de su presidente, el camarada Ludo Martens, para tomar parte en el seminario de este año sobre el gran tema de: "La vía de la Revolución de Octubre es la vía de la libertad para los trabajadores". Al no poder asegurar plenamente el poder participar en este seminario, me permito transmitirles desde ya algunas reflexiones básicas que, así lo espero, serán bien comprendidas por todos los camaradas y amigos.
Deseo mencionar desde el inicio de esta carta que la conmemoración de la gran Revolución de Octubre, en particular en el año de su 80 aniversario, es un acto que merece ser celebrado en el mundo entero por todos los comunistas y todos los progresistas.
El marxismo nació hace 150 años en tanto que resultado de las condiciones económicas y sociales, del desarrollo de las ciencias de la naturaleza y de investigaciones teóricas. Antes del nacimiento del marxismo, los movimientos del proletariado, como el movimiento Cartista en Inglaterra, las insurrecciones de Lyón en Francia y en Alemania, fueron espontáneos y sin objetivos políticos claros. Marx y Engels fueron los primeros en comprender la necesidad de la argumentación científica de la lucha del proletariado contra la burguesía y de su organización en un partido político revolucionario independendiente. Marx y Engels Fundaron el comunismo científico. Sus ideas geniales fueron formuladas en el Manifiesto del Partido comunista. Lenin y Stalin continuaron y enriquecieron más la obra monumental de Marx y Engels. Setenta años después del nacimiento del marxismo, esto se escuchó en Rusia con los cañones de Europa y el triunfo de la Revolución de Octubre -la primera revolución proletaria. Esta revolución marca el inicio de la caída fatal del capitalismo. Las ideas y la bandera roja de la Revolución de Octubre se convirtieron en un sol radiante que iluminó el camino a las masas explotadas y oprimidas del mundo entero y que han conducido al sistema socialista mundial. La gran Revolución abrió grandes horizontes, pero la contrarrevolución también abrió grandes abismos, la contrarrevolución kroutchovista que bajo los colores del revisionismo condujo el socialismo en la patria de los soviet hasta el precipicio. Esta contrarrevolución no fue dirigida contra un individuo o un grupo de individuos sino contra el marxismo-leninismo, contra la Revolución de Octubre, contra los revolucionarios, contra la democracia y en favor de la restauración del capitalismo en la Unión Soviética y la destrucción final de esta, así como para el derrumbe del socialismo en Europa del este. Todo esto constituye una gran tragedia que tiene su fuente principal en el lecho del revisionismo. Es por esto que cuando hablamos hoy día de la Revolución de Octubre, no podemos dejar de hablar de la traición revisionista que llevó a la destrucción y a la desaparición del campo socialista. Para llegar a este objetivo, el capitalismo mundial trabajó arduamente. Pero, si el comunismo perdió una batalla, no ha perdido la guerra.
Estoy de acuerdo con la plataforma publicada por el seminario de Bruselas por la defensa del marxismo leninismo y la lucha contra el revisionismo y el oportunismo. Yo no he asistido a estos seminarios y no tengo un grado de conocimiento suficiente en relación a la forma en que los comunistas de diferentes partidos y diferentes países han tratado este problema. Yo pienso que la manera de tratar este problema es fundamental. Nosotros los comunistas, sabemos muy bien que hay quienes han combatido el marxismo aclamándolo. Nadie debe olvidar e ignorar que Khrutchev mismo defendió con palabras el marxismo-leninismo, al mismo tiempo que en los hechos lo atacó, porque él era fundamentalmente un anti-marxista y sobretodo un anti-leninista. Pero nosotros, comunistas, si queremos defendernos contra tales elementos, debemos desarrollar un debate sobre este problema, en el cual los comunistas expongan de manera sincera y abierta sus concepciones, con el gran objetivo de avanzar en la unidad del movimiento comunista internacional que es tan necesario. La consigna del Manifiesto Comunista era "Proletarios de todos los Países Uníos" Pienso que únicamente los comunistas nidos en el mundo al seno del gran partido del proletariado serán la locomotora que conducirá el tren de la sociedad humana hacia la democracia popular, hacia el socialismo y el comunismo. No creo que esta unidad se realice fácilmente, en una hora ni en un día. Pero esta unidad puede ser obtenida y es necesario realizarla sobre bases sólidas, independientes de todo oportunismo, de todo liberalismo, de todo dogmatismo.
Es ya una tradición que en el seminario de Bruselas tomen parte partidos que sostienen la línea de Mao Zedong y otros partidos que sostienen la línea de Henver Hoxha y otros partidos que se inspiran en la Revolución Cubana y en el Che Guevara, mientras que otros se sitúan de manera independiente. Es natural que distintos partidos tengas posiciones diferentes sobre diferentes dirigentes comunistas y revolucionarios, pero es necesario que luego de debates científicos arribemos a conclusiones científicas.
Es así como los comunistas pueden marchar en una unidad de pensamiento y de acción en una línea justa. La vida de dirigentes comunista y revolucionarios se encuentran en las ideas y en los actos.
Hace cuarenta años, por ejemplo, el dirigente del Partido del Trabajo de Albania, Enver Hoxha, desenmascaró la traición krutchovista. En aquel tiempo, numerosos partidos no han creído en la palabra de Enver Hoxha o no tuvieron la valentía para reconocerle la razón y quedaron bajo la tutela de Krutchev. Sin embargo algunos partidos han comprendido la traición y siguieron la línea de Enver Hoxha. ¿Que preveía entonces Enver Hoxha?
Todos sabemos hoy en día que la historia a verificado el desmembramiento del campo socialista. Pienso que es en este sentido donde es necesario observar la vida y obra de los dirigentes comunistas y revolucionarios. No he citado este ejemplo para pretender hacer en esta carta un análisis de la vida y obra del camarada Enver Hoxha, ni por negar la obra democrática y revolucionaria de otros dirigentes, sino únicamente para decir que ha llegado el tiempo en que los análisis, los debates, las reflexiones, deben ser llevados sobre la base de los hechos, por lo demás hoy confirmados por la historia.
Si no me equivoco, existen en India cuatro partidos comunistas marxistas-leninistas, con cuatro tendencias diferentes. Uno se inspira en Enver Hoxha, otro en Mao Zedong, otro en la ex URSS y el otro en la línea de la Revolución Cubana. Pienso que si los cuatro se inspiraran en el marxismo-leninismo no habría cuatro tendencias, la ciencia marxista-leninista es una sola. Es sin dudas una ciencia que se enriquece continuamente. Los juicios con sabiduría y responsabilidad histórica hacia aquellos que han enriquecido o enriquecen esta ciencia deben ser hechos considerando todas las cosas frente al espejo infalible del marxismo-leninismo. La vieja expresión "al Cesar lo que es del Cesar" nos debe permitir comprender que es necesario otorgar a cada dirigente el lugar que él merece. Lo que hay de bueno en Rosa Luxemburgo, no podemos admitirlo como malo; lo que hay de bueno en el Che Guevara, no podemos admitirlo como malo. El escultor que ha esculpido los monumentos de dirigentes comunistas y revolucionarios de cada nación y de cada continente, nos recuerda que somos mortales, solo el marxismo-leninismo es inmortal. EL marxismo-leninismo es nuestra brújula y no nos equivocamos en nuestra elección cuando nos guiamos por esta brújula. Ella es clara como la luz del sol y pura como el pan. Georges Dimitrov, Ernst Thaelmann, Klement Gottwald y tantos otros han sido combatientes comunistas entregados, ellos tienen biografías revolucionarias y cuando estas biografías son estudiadas y apreciadas, nos guían por el verdadero camino del marxismo-leninismo. El presidente Mao Zedong fue un gran dirigente revolucionario por la liberación de China, legendario comandante del ejército, fundador de la República Popular China. El presidente Mao Zedong hizo mucho por el pueblo chino y fue también un gran amigo del pueblo albanés. Enver Hoxha, sin embargo, expresó contradicciones ideológicas de principio en diferentes momentos con el Presidente Mao Zedong. Es algo absolutamente normal en la vida y la obra de dirigentes comunistas. Es así que ha ocurrido en toda la historia del marxismo. Que los debates ideológicos entre los dirigentes comunistas hayan sido justos o no, sólo la historia puede juzgar, guiándose por el marxismo-leninismo. Un juicio objetivo, científico, desapasionado, conduce también a la unidad ideológica. La humanidad tiene una gran preocupación, que solamente el puño unido del proletariado y de los pueblos puede borrar de la faz de la tierra. La historia describirá a sus héroes tal y como fueron y no tal como no lo fueron. Cualquier definición unilateral de un individuo hoy día estará en contradicción con el futuro.
Considero personalmente como muy positivo el hecho de que en los seminarios de Bruselas se dé el lugar al internacionalismo. El internacionalismo proletario combina y une los intereses nacionales propios de cada país con los intereses internacionales. Tenemos una historia y una experiencia secular de internacionalismo proletario. La bandera de este internacionalismo ha sido la patria de Lenin. Pienso que la pequeña Albania, dirigida por el Partido del Trabajo de Albania, cumplió su deber en materia de internacionalismo proletario. Esta obra fue perfecta o no, como el David de Miguel Angel, se puede discutir, pero esta fuera de toda duda que con toda su fuerza, el Partido hizo todo por llevar a bien esta gran tarea. Yo no tengo la intención de analizar las direcciones en las que la pequeña Albania cumplió su deber en materia de internacionalismo proletario, en consideración con el movimiento comunista mundial, porque es un tema vasto, pero quiero expresar abiertamente y sinceramente, con toda fraternidad, que el movimiento comunista internacional no ha cumplido, hasta hoy día, su deber hacia la pequeña Albania, mientras esta ha estado atacada y destruía por los traidores al interior del país y por la burguesía internacional. Es una vergüenza para el movimiento comunista en Europa y en todo el mundo. (...)
Por esta actitud heroica nosotros hemos sido pesadamente castigados, como ningún otro país en el mundo. Cuando la fortaleza albanesa finalmente cayó, hubiera sido admirable y llenado de honor a los comunistas rusos, el que hubieran manifestado en la plaza del Kremlin en un espíritu de solidaridad respecto a Albania y su pueblo, pequeño pero heroico, sobre el cual han caído muchas tragedias. Pero los comunistas rusos no lo hicieron. Es una vergüenza para los comunistas rusos. Ellos pecaron de una megalomanía de gran Estado, mientras que las espaldas de un pequeño pueblo eran aplastadas por la barbarie. Conozco y tengo respeto por la camarada Nina Andreeva y por sus camaradas, pero esto no quiere decir que yo no exprese mis reservas al respecto de la actitud indiferente de los comunistas rusos en general con respecto a Albania. Existe también cerca de ellos con altas funciones dirigentes gente de una susodicha Unión de partidos Comunistas de Rusia, que cuando se trata de Albania, hablan con la lengua de aquellos que no saben nada de Albania, o bien saben, pero prefieren hablar el idioma de Krutchev. Nosotros, los albaneses, conocemos mejor el marxismo-leninismo que los rusos, no porque seamos más inteligentes que ellos, sino porque nosotros hemos leído a Lenin y hemos sacado una enseñanza de la simplicidad de Lenin. Yo conservo la esperanza que los comunistas rusos también sacarán partido de la simplicidad de Lenin. Todos deben aprender de la simplicidad de Lenin. Todos deben aprender del internacionalismo de Lenin. En caso contrario, no tendríamos de comunistas más que el nombre.
Usted, camarada Ludo Martens, me ha escrito que desearía proponer el inicio de una nueva campaña de solidaridad con el Partido Comunista de Albania. En nombre del Partido Comunista de Albania yo le agradezco a ustedes y a todos los camaradas de estos partidos en el mundo entero, que dan testimonio de su espíritu de solidaridad con los comunistas albaneses, los cuales pasan verdaderamente momentos críticos. Creo que independientemente de las diferentes corrientes, es un deber humano de los sesenta partidos que estarán presentes en el Seminario de Bruselas y que une, de todas maneras, al frente anticapitalista, de levantar su voz contra estas fuerzas interiores y exteriores que han causado a los albaneses la tragedia sin ningún precedente en la Historia de este siglo. La pequeña Albania era considerada por los medios capitalistas europeos y mundiales como el bastión del socialismo y la defensa del comunismo, es entonces uniendo sus fuerzas que hicieron retroceder a Albania 100 años, que trabajaron para desacreditar el socialismo como sistema económico social. Pienso que sería interesante para cada partido comunista y democrático revolucionario, organizar en el futuro una reunión especial sobre Albania. Si esto fuera considerado posible estaría listo y feliz para exponer la verdad sobre el socialismo y el capitalismo en Albania. Pienso que a propósito de Albania muchas cosas deben ser aclaradas, ya que todos los comunistas y demócratas revolucionarios no tienen un conocimiento suficiente de esta realidad. Este año en, Albania, se desató una revolución popular espontánea. Pienso que es interesante dar a conocer esta revolución espontánea todas las fuerzas progresistas. El pueblo albanés abrió los depósitos y los túneles de armas, tomó los cañones, los aviones, la flota de guerra, los carros y se levantó en una insurrección armada ya que el ejército, en el sentido clásico del término, no existe más. Millones de armas están en manos del pueblo. Esta revolución y los factores que la provocaron no pueden ser explicados en dos palabras. Si los partidos comunistas o democráticos progresistas que acuden a Bruselas expresan interés por mi proposición, estaré, como lo he afirmado anteriormente, completamente listo a dar una exposición sobre el socialismo, sobre la vuelta al capitalismo y sobre la revolución popular espontánea, en el momento más apropiado.
Así mismo, creo que sería un honor para esta reunión que se hará en Bruselas del 2 al 4 de mayo, publicar una resolución o una declaración de apoyo al pueblo álbales y al Partido Comunista de Albania. Una resolución firmada por todos los partidos sería un acto humano con respecto al pueblo que ha sido y sigue siendo un amigo de los pueblo del mundo entero. Los partidos comunistas son puestos fuera de la ley por los fascistas. (...)
Concluyendo mi corta carta, deseo subrayar, que los partidos comunista y democráticos progresistas actuales, actúan casi todos en las condiciones del capitalismo. Algunos tienen la gran misión de luchar por la Revolución Proletaria y otros por la Revolución Democrática y de Liberación antiimperialista. El contenido de la Revolución debe ser discutido en las condiciones de su desarrollo. Sobre esta gran vía hay tareas particulares, pero también tareas comunes para cumplir tareas comunes, los contactos entre los partidos, su lucha común contra el revisionismo y el oportunismo, el conocimiento de las posiciones de uno y otros, el debate en un espíritu de camaradería son ciertamente necesarios. En el caso en que partidos diferentes tienen divergencias ideológicas sobre una cuestión u otra, esto puede ser arreglado gradualmente restaurando la confianza al servicio de los ideales más altos de la humanidad, pro sin restaurar el oportunismo. El revisionismo y el oportunismo sólo nos han aportado desgracia y tragedia. Es por esto que mientras más nos alejemos de estas enfermedades más nos sanaremos de ellas y mejor será. Los contactos entre partidos, las discusiones y las relaciones entre ellos deben ciertamente efectuarse sobre una base de igualdad y sinceridad. Cada partido tiene su identidad y su individualidad, su independencia práctica e ideológica, sus problemas internos. Si llegamos a la unidad de concepciones que conciernen tareas internacionales de la clase obrera, entonces la cooperación en las acciones comunes conducirá a la única fuerza internacional que defiende con consecuencia los intereses de la Revolución y el Socialismo, el refuerzo de la unidad del Movimiento comunista marxista-leninista internacional. Apoyándonos en el marxismo-leninismo, en la Revolución, nosotros vamos hacia la unidad, mientras que el apoyo al revisionismo y a la contrarrevolución llevan a la división y la dispersión. Cada comunista o demócrata convencido tiene por tarea aportar su piedra a la fortaleza de la unidad del movimiento revolucionario. Aquel que decide es juzgado por la Historia.
Como comunista y ciudadano, deseo a todos aquellos que están reunidos este año en Bruselas, para discutir de la Revolución de Octubre un buen trabajo y éxito, la unidad de pensamiento para el bien de la Revolución y de los pueblo. El tiempo que vivimos necesita comunistas y demócratas que sean llamas que no apaguen jamás y no velas que se funden rápido. Al servicio de nuestros ideales, dejemos fundirse estas velas manteniéndonos siempre como llamas. Los saludo desde un país que aún hace la Revolución con las armas en la mano, de un país que ha resistido una catástrofe. Expreso la convicción que este encuentro condenará también, la catástrofe albanesa y sus responsables. Termino esta carta con algunas líneas escritas por el dirigente comunista brasileño Joao Amazonas hace algunos años: "Un gran acontecimiento ha removido el régimen de la burguesía el 7 de noviembre de 1997 (...)"
Vivan los revolucionarios de todo el mundo!!
Gloria al marxismo-leninismo!!
Tirana, 10 de marzo de 1997
Saludos sinceros, Hysni Milloshi.