Sergio Ortiz escribió:Con los monopolios, nada!
Cuando uno lee los ministros de Macri no puede menos que recuperar el pensamiento del Che, de mayo de 1962, en el sentido de que la línea divisoria es con o contra los monopolios.
Hay gerentes para todos los gustos. La última es Isela Costantini, CEO de General Motors que irá a Aerolíneas.
Obvio, nuestra critica a esa mujer de las multinacionales. El kirchnerismo, en cambio, antes o después de criticarla, debería hacer una autocrítica porque en 2009 prestó 70 millones de dólares a esa multinacional yanqui para su planta de General Alvear, Santa Fe. El PL dijo entonces que la plata de Anses no debía financiar a multinacionales. Que en todo caso las casas matrices de Detroit o Chicago prestaran a sus sucursales de Argentina.
Claro que no es lo mismo. Uno, el gobierno de Macri, es directamente o será un gobierno de los monopolios. El otro, de Cristina, era un gobierno neodesarrollista dirigido por una alianza de gran burguesía nacional y burguesía nacional, con ancha base popular que al final se fue angostando. Ese gobierno tuvo contradicciones con los monopolios, caso Clarín, Repsol, Sociedad Rural AFJP, pero nunca tuvo una política antimonopolista y antiimperialista. Es más, prestó millonadas a GM, Fiat y también subsidió a Ledesma en su planta de bioetanol, pese a que era y es un ícono del monopolio y responsable del terrorismo de Estado. A eso me refería, estimado Horacio.
¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
Sondeo
¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
- [ 26 ]
- [53%]
- [ 1 ]
- [2%]
- [ 0 ]
- [0%]
- [ 3 ]
- [6%]
- [ 12 ]
- [24%]
- [ 1 ]
- [2%]
- [ 0 ]
- [0%]
- [ 0 ]
- [0%]
- [ 1 ]
- [2%]
- [ 5 ]
- [10%]
Votos Totales: 49
sorge- Colaborador estrella
- Cantidad de envíos : 5258
Reputación : 6087
Fecha de inscripción : 15/12/2009
- Mensaje n°626
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
ajuan- Administrador
- Cantidad de envíos : 9382
Reputación : 11102
Fecha de inscripción : 09/05/2010
Localización : Latinoamerica
- Mensaje n°627
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
Se hace medio insoportable es cierto UyL lo que sube sorge siempre el mismo tipo que aunque tenia criticas buenas (hace varios años) ahora ya no tiene credibilidad por cuestiones que criticaba/a las acciones del gobierno por las actitudes individuales de las personas sin atacar las cuestiones de clases algo que hicieron los supuestos comunistas aliados a la socialdemocracia K. Seguramente ahora va a cambiar el discurso 180 grados magicamente lo raro es que pocas veces dejo al descubierto los monopios o empresas del gobierno actual (y si lo hacia era porque esa persona era mala) ... en fin cada uno sube lo que quiere y se come el verso que quiere.
sorge- Colaborador estrella
- Cantidad de envíos : 5258
Reputación : 6087
Fecha de inscripción : 15/12/2009
- Mensaje n°628
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
Tambien son insorpotables determinadas criticas en el comunismo español,yo no descalifico a nadie personalmente por el simple hecho de subirlas a este foro, la realidad de cada pais tiene que ser abordadas en su totalidad, no intentar ocultar determinado aspecto con trazo grueso.
ajuan- Administrador
- Cantidad de envíos : 9382
Reputación : 11102
Fecha de inscripción : 09/05/2010
Localización : Latinoamerica
- Mensaje n°629
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
sorge escribió:Tambien son insorpotables determinadas criticas en el comunismo español,yo no descalifico a nadie personalmente por el simple hecho de subirlas a este foro, la realidad de cada pais tiene que ser abordadas en su totalidad, no intentar ocultar determinado aspecto con trazo grueso.
Exactamente, por eso fui claro, es insoportable lo que subis no vos. Ademas aunque sea insoportable hay que bancarsela y de paso sirve para poder explicar lo que es ese tipo o en lo que se esta convirtiendo. Una lastima porque sabe una banda pero bueno.
Bienvenida toda noticia que sirva para aportar el debate y al foro.
Saludos!
UyL- Gran camarada
- Cantidad de envíos : 382
Reputación : 399
Fecha de inscripción : 23/01/2012
- Mensaje n°630
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
sorge escribió:
Eso se lo dices a tus compatriotas que lo publica a la cara si tienes cojones, yo tambien te quiero bestia parda.
Te lo digo a vos como podría decírselo a otros extranjeros en este foro: no se guíen por esas pelotudeces. Y lo digo de onda, les estoy avisando que no es vía para entender lo que pasa en Argentina. Por algo ningún usuario argentino le da bola a lo que compartís. Están tan alejados de la realidad y son tan pelotudos como la jefa del PP español.
No lo tomés personal porque no te conozco.
Sobre el PL, para decirles algo en la cara no hacen falta cojones, lo complicado es encontrarlos.
UyL- Gran camarada
- Cantidad de envíos : 382
Reputación : 399
Fecha de inscripción : 23/01/2012
- Mensaje n°631
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
Skoll escribió:¿Lavarle la cara a 6,7,8? como si eso fuera posible... fue bastante áspera sobre todo con las desorbitadas intervenciones de ese pobre infeliz. ¿Filokirchnerismo?, ¿la escuchaste?
Igual, no se si servirá de mucho. Si con Chevron, Barrick Gold, Berni, Milani etc. el ala izquierda de la juventud kirchnerista no entró en crisis, dudo que este tipo de intervenciones puedan hacer algo.
Sin embargo se la convocó para explicar "la decisión de la izquierda de dar quorum"
En el contexto de un macartismo de cotillón tanto desde el oficialismo como desde la oposición, a mi me pareció una intervención estupenda.
Dio un ejemplo del uso socialista del tiempo en esas tribunas: breve, directo, y sin vaselina.
Como digo esto, digo también que noté que tuvo que esquivar la participación lamentable junto a los oligarcas del campo de un sector del FIT en el quilombo de la 225; y que defendió a los llorones del PO cuando se intentó tirarles mierda.
Sí, la escuché, filokirchnerismo rastrero y oportunismo claro. Para Bregman el problema es que el kirchnerismo se derechizó, por eso fue a darle explicaciones al ala izquierda del kichnerismo. No es nuevo, 12 años así el PTS. Con Macri supongo que van a vacilar menos.
Y 678 la usó para lavarse la cara, TodasLasVocesEn678. Años tirándole mierda a la izquierda desde ese programa choto, y el PTS va cuando los necesitan.
Razion- Moderador/a
- Cantidad de envíos : 7201
Reputación : 7651
Fecha de inscripción : 29/09/2011
- Mensaje n°632
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
UyL escribió:Skoll escribió:¿Lavarle la cara a 6,7,8? como si eso fuera posible... fue bastante áspera sobre todo con las desorbitadas intervenciones de ese pobre infeliz. ¿Filokirchnerismo?, ¿la escuchaste?
Igual, no se si servirá de mucho. Si con Chevron, Barrick Gold, Berni, Milani etc. el ala izquierda de la juventud kirchnerista no entró en crisis, dudo que este tipo de intervenciones puedan hacer algo.
Sin embargo se la convocó para explicar "la decisión de la izquierda de dar quorum"
En el contexto de un macartismo de cotillón tanto desde el oficialismo como desde la oposición, a mi me pareció una intervención estupenda.
Dio un ejemplo del uso socialista del tiempo en esas tribunas: breve, directo, y sin vaselina.
Como digo esto, digo también que noté que tuvo que esquivar la participación lamentable junto a los oligarcas del campo de un sector del FIT en el quilombo de la 225; y que defendió a los llorones del PO cuando se intentó tirarles mierda.
Sí, la escuché, filokirchnerismo rastrero y oportunismo claro. Para Bregman el problema es que el kirchnerismo se derechizó, por eso fue a darle explicaciones al ala izquierda del kichnerismo. No es nuevo, 12 años así el PTS. Con Macri supongo que van a vacilar menos.
Y 678 la usó para lavarse la cara, TodasLasVocesEn678. Años tirándole mierda a la izquierda desde ese programa choto, y el PTS va cuando los necesitan.
UyL, con Macri enfrente, y con 4 años de gobierno por delante ¿calienta mucho éste tipo de discusión? Es decir, se va a seguir tirando contra el Kirchnerismo, cuando es bastante probable que se disuelva en diferentes alas del PJ y el resto quede en la calle. No le veo mucho sentido político (se le criticaba eso mismo a muchos sectores que desde el kirchnerismo la tiraban contra el menemismo -con la obvia diferencia que tenían a menemistas en sus filas-. Ahora a mi entender hay que recibir con todo al gobierno que comienza y que ya está jugando sus cartas. En su primer semana de electo ya eligió a cuanto gerente de las multinacionales podía.
Además 678 posiblemente tenga los días contados, así que tampoco veo que tanta lavada de cara puede tener -si no hay proyección política de la misma-.
Por ahí tenés otro análisis y considerás que el Kirchnerismo está vivo y con posibilidades de gobierno en el corto plazo, y que sigue siendo el principal blanco de ataque. O por el contrario, alguna de esas alas del PJ que menciono.
Emelianenko- Camarada
- Cantidad de envíos : 119
Reputación : 119
Fecha de inscripción : 07/10/2014
- Mensaje n°633
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
Razion escribió:UyL escribió:Skoll escribió:¿Lavarle la cara a 6,7,8? como si eso fuera posible... fue bastante áspera sobre todo con las desorbitadas intervenciones de ese pobre infeliz. ¿Filokirchnerismo?, ¿la escuchaste?
Igual, no se si servirá de mucho. Si con Chevron, Barrick Gold, Berni, Milani etc. el ala izquierda de la juventud kirchnerista no entró en crisis, dudo que este tipo de intervenciones puedan hacer algo.
Sin embargo se la convocó para explicar "la decisión de la izquierda de dar quorum"
En el contexto de un macartismo de cotillón tanto desde el oficialismo como desde la oposición, a mi me pareció una intervención estupenda.
Dio un ejemplo del uso socialista del tiempo en esas tribunas: breve, directo, y sin vaselina.
Como digo esto, digo también que noté que tuvo que esquivar la participación lamentable junto a los oligarcas del campo de un sector del FIT en el quilombo de la 225; y que defendió a los llorones del PO cuando se intentó tirarles mierda.
Sí, la escuché, filokirchnerismo rastrero y oportunismo claro. Para Bregman el problema es que el kirchnerismo se derechizó, por eso fue a darle explicaciones al ala izquierda del kichnerismo. No es nuevo, 12 años así el PTS. Con Macri supongo que van a vacilar menos.
Y 678 la usó para lavarse la cara, TodasLasVocesEn678. Años tirándole mierda a la izquierda desde ese programa choto, y el PTS va cuando los necesitan.
UyL, con Macri enfrente, y con 4 años de gobierno por delante ¿calienta mucho éste tipo de discusión? Es decir, se va a seguir tirando contra el Kirchnerismo, cuando es bastante probable que se disuelva en diferentes alas del PJ y el resto quede en la calle. No le veo mucho sentido político (se le criticaba eso mismo a muchos sectores que desde el kirchnerismo la tiraban contra el menemismo -con la obvia diferencia que tenían a menemistas en sus filas-. Ahora a mi entender hay que recibir con todo al gobierno que comienza y que ya está jugando sus cartas. En su primer semana de electo ya eligió a cuanto gerente de las multinacionales podía.
Además 678 posiblemente tenga los días contados, así que tampoco veo que tanta lavada de cara puede tener -si no hay proyección política de la misma-.
Por ahí tenés otro análisis y considerás que el Kirchnerismo está vivo y con posibilidades de gobierno en el corto plazo, y que sigue siendo el principal blanco de ataque. O por el contrario, alguna de esas alas del PJ que menciono.
678 no existe más. No se si lo anunciaron o algo, pero fue consigna de la campaña de Macri que no haya un programa de ese tipo en TVP.
Vamos a ver cómo reacciona la masa residual kirchnerista. A algunos los escucho acá desde donde trabajo, yendo para Plaza de Mayo. La mayoría tienen pinta de rentados.
surfas- Colaborador estrella
- Cantidad de envíos : 4302
Reputación : 4497
Fecha de inscripción : 15/10/2011
- Mensaje n°634
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
Tripero- Moderador de Reserva
- Cantidad de envíos : 935
Reputación : 1171
Fecha de inscripción : 04/01/2013
Localización : Sudamérica
- Mensaje n°635
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
LA IZQUIERDA POPULAR FRENTE A LA NUEVA ETAPA
DICIEMBRE 2, 2015 / CAMBIO, NÚMERO 30, NÚMERO ACTUAL, SLIDER / 10 VIEWS / 0 LIKES /
LA IZQUIERDA POPULAR FRENTE A LA NUEVA ETAPA
El apoyo de PATRIA GRANDE y otras fuerzas a la fórmula del FPV en el balotaje del 22 de noviembre tuvo gran impacto en la militancia popular y fue recibido como una novedad positiva por sectores politizados de la población que nos conocían superficialmente o directamente ignoraban nuestra existencia. Como señalamos en el número anterior de Cambio, el “no da lo mismo” no fue un slogan inventado para el balotaje sino una posición sostenida durante años y que viene marcando las importantes diferencias entre el kirchnerismo y la oposición antikirchnerista. Del mismo modo en que no nos daba lo mismo quién ganaba la pelea por las retenciones o si se aplicaba la ley de medios o si se acataba el fallo Griesa, tampoco nos dio lo mismo quién ganaba en el balotaje.
Pero indudablemente en este caso hemos dado un salto cualitativo importante. No sólo por la referencia pública conquistada con este pronunciamiento, sino por la aparición en el escenario político de “otra izquierda”, justamente aquella que de manera tan sencillamente comprensible se resumió en el slogan elegido. PATRIA GRANDE y la Izquierda Popular representan entre otras cosas eso: una izquierda a la que no le da todo lo mismo.
Pero más allá de esta coyuntura particular, debemos pensar cómo se relaciona esta política con la nueva etapa que se abre en el país a raíz del triunfo del PRO y las potencialidades de la Izquierda Popular en la misma.
Balance y debate en la militancia popular
Naturalmente los próximos años serán de intensa reflexión y debate en la militancia. La explicación del triunfo del PRO, su subestimación como fuerza política novedosa, su correspondencia con un posible giro a nivel regional, los límites del “modelo”, las deficiencias y errores de la conducción del FPV, las debilidades del progresismo y las izquierdas no kirchneristas, entre muchos otros tópicos. Indudablemente entre la militancia que apoyó al gobierno estos doce años, será inevitable cierto “pase de facturas”.
La Izquierda Popular debe prepararse para intervenir en ese debate. Pero como no se trata de una discusión académica, la meta no es “tener razón” elaborando el argumento más irrebatible. El objetivo es político y debemos definirlo. Resulta necesario elegir los argumentos, aquellos que contribuyan mejor a ese objetivo. Es preciso asumir una actitud en el debate, que nos garantice mayor escucha a nuestros planteos.
El objetivo es ganar. La Izquierda Popular debe ser una izquierda que se rompe la cabeza pensando en cómo ganar y ese objetivo supera al de tener la mejor denuncia, la mejor lucha, el mejor programa. Ganarle el gobierno a la nueva derecha del PRO-Cambiemos. Que sea dentro de cuatro, ocho o más años dependerá de diversas variables, muchas de las cuales no controlamos. Pero el objetivo no varía: construir una alternativa de mayorías al gobierno liberal de Mauricio Macri. Esta opción de mayorías debe superar la experiencia del kirchnerismo, aunque contenerla. Siguiendo la máxima de Cooke, no se puede sin peronismo pero tampoco alcanza.
Nuestros argumentos en el debate de la militancia popular son que hay que confiar menos en el consumo y más en la política. Menos en las instituciones y más en la calle. Menos en las estructuras y más en el pueblo. Si algo demostró el triunfo del PRO es que la moderación no es garantía de continuidad. Lo que no avanza, se estanca y retrocede. Privilegiar las estructuras rancias por sobre una democratización real de la política, le dio una enorme ventaja a la derecha reconvertida como “lo nuevo”.
Un importante sector de la militancia kirchnerista está pensando en aceptar un reordenamiento del PJ como fuerza de oposición bajo una conducción más conservadora. El propio Scioli, personajes como Urtubey, Gioja y los “renovadores” liderados por Sergio Massa aparecen como posibles protagonistas. Humildemente decimos que esta salida sería persistir en el camino equivocado.
Si el kirchnerismo fue la vía de reconciliación de amplios sectores de la población con la militancia y en las camadas más jóvenes el primer contacto con la política, es necesario desatar y liberar esa energía en lugar de maniatarla a quienes entienden la construcción política exclusivamente como fuerza electoral y administración burocrática de los recursos del Estado.
Nuestra actitud debe ser firme, pero también autocrítica y fraterna. El debate en cuestión no es un tema del kirchnerismo, sino de todo el campo popular. Cada uno con sus responsabilidades, bien diferentes, claro está. Pero de ninguna manera nuestra construcción y nuestra política son ajenas a los dilemas planteados. Ni quienes pronosticaron un “ascenso de la izquierda” cuando lo que ocurría era lo opuesto, un “ascenso de la derecha”, ni quienes mantuvieron una posición desde el progresismo anti-K.
Flaco favor le haríamos al campo popular si nos paráramos en el pedestal a decir “vieron que teníamos razón” autoproclamándonos una autoridad política que aún no nos hemos ganado. Pocas cosas han sido más inútiles en la tradición de la militancia de izquierda de nuestro país. La militancia que formó parte del kirchnerismo deberá balancear los problemas de engordar y apostar a un empresariado nacional que como siempre termina abrazado al liberalismo. También deberá balancear no haber apostado decisivamente a la participación popular.
Pero las fuerzas populares que no formamos parte del FPV también debemos plantearnos las razones de no haber logrado una mayor incidencia en la disputa de poder en nuestro país y el haber subestimado momentos de conflicto en que, visto desde hoy, se hace evidente que estaba en juego más de lo que parecía para el futuro de nuestro país.
Una oportunidad para construir una Izquierda Popular
El nuevo escenario abre enormes desafíos para construir el proyecto de la Izquierda Popular. PATRIA GRANDE en su último Plenario Nacional de Delegados y Delegadas definió como orientación fundamental para la etapa la búsqueda de una confluencia con lo mejor del proceso político argentino desde el 2001 hasta aquí. La mayor parte se expresa en la militancia y la base social del kirchnerismo.
Para llevar adelante esta política, el debate que abierto con el triunfo de la derecha es fundamental. ¿Qué tipo de oposición y alternativa presentaremos al macrismo? ¿Será una versión más moderada del FPV liderada por el sector más conservador del PJ? ¿O será una nueva plataforma política nacida de la confluencia de lo mejor del kirchnerismo con la izquierda a la que no le da lo mismo? ¿Se atreverá ese posible reagrupamiento a colocar como central la participación popular, la transformación del Estado y la democratización del sistema político? ¿Y a desafiar el horizonte de un “capitalismo con inclusión”? Para dar esa batalla resulta imprescindible afianzar y fortalecer la construcción de la Izquierda Popular en la Argentina, hacerla crecer, profundizar su inserción social y perfeccionar su capacidad de intervención política. Los próximos años presentan una gran oportunidad para ello. ¡Vamos a hacerlo!
Por Itai Hagman
Emelianenko- Camarada
- Cantidad de envíos : 119
Reputación : 119
Fecha de inscripción : 07/10/2014
- Mensaje n°636
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
Tripero escribió:
- Sarasa de PG:
LA IZQUIERDA POPULAR FRENTE A LA NUEVA ETAPA
DICIEMBRE 2, 2015 / CAMBIO, NÚMERO 30, NÚMERO ACTUAL, SLIDER / 10 VIEWS / 0 LIKES /
LA IZQUIERDA POPULAR FRENTE A LA NUEVA ETAPA
El apoyo de PATRIA GRANDE y otras fuerzas a la fórmula del FPV en el balotaje del 22 de noviembre tuvo gran impacto en la militancia popular y fue recibido como una novedad positiva por sectores politizados de la población que nos conocían superficialmente o directamente ignoraban nuestra existencia. Como señalamos en el número anterior de Cambio, el “no da lo mismo” no fue un slogan inventado para el balotaje sino una posición sostenida durante años y que viene marcando las importantes diferencias entre el kirchnerismo y la oposición antikirchnerista. Del mismo modo en que no nos daba lo mismo quién ganaba la pelea por las retenciones o si se aplicaba la ley de medios o si se acataba el fallo Griesa, tampoco nos dio lo mismo quién ganaba en el balotaje.
Pero indudablemente en este caso hemos dado un salto cualitativo importante. No sólo por la referencia pública conquistada con este pronunciamiento, sino por la aparición en el escenario político de “otra izquierda”, justamente aquella que de manera tan sencillamente comprensible se resumió en el slogan elegido. PATRIA GRANDE y la Izquierda Popular representan entre otras cosas eso: una izquierda a la que no le da todo lo mismo.
Pero más allá de esta coyuntura particular, debemos pensar cómo se relaciona esta política con la nueva etapa que se abre en el país a raíz del triunfo del PRO y las potencialidades de la Izquierda Popular en la misma.
Balance y debate en la militancia popular
Naturalmente los próximos años serán de intensa reflexión y debate en la militancia. La explicación del triunfo del PRO, su subestimación como fuerza política novedosa, su correspondencia con un posible giro a nivel regional, los límites del “modelo”, las deficiencias y errores de la conducción del FPV, las debilidades del progresismo y las izquierdas no kirchneristas, entre muchos otros tópicos. Indudablemente entre la militancia que apoyó al gobierno estos doce años, será inevitable cierto “pase de facturas”.
La Izquierda Popular debe prepararse para intervenir en ese debate. Pero como no se trata de una discusión académica, la meta no es “tener razón” elaborando el argumento más irrebatible. El objetivo es político y debemos definirlo. Resulta necesario elegir los argumentos, aquellos que contribuyan mejor a ese objetivo. Es preciso asumir una actitud en el debate, que nos garantice mayor escucha a nuestros planteos.
El objetivo es ganar. La Izquierda Popular debe ser una izquierda que se rompe la cabeza pensando en cómo ganar y ese objetivo supera al de tener la mejor denuncia, la mejor lucha, el mejor programa. Ganarle el gobierno a la nueva derecha del PRO-Cambiemos. Que sea dentro de cuatro, ocho o más años dependerá de diversas variables, muchas de las cuales no controlamos. Pero el objetivo no varía: construir una alternativa de mayorías al gobierno liberal de Mauricio Macri. Esta opción de mayorías debe superar la experiencia del kirchnerismo, aunque contenerla. Siguiendo la máxima de Cooke, no se puede sin peronismo pero tampoco alcanza.
Nuestros argumentos en el debate de la militancia popular son que hay que confiar menos en el consumo y más en la política. Menos en las instituciones y más en la calle. Menos en las estructuras y más en el pueblo. Si algo demostró el triunfo del PRO es que la moderación no es garantía de continuidad. Lo que no avanza, se estanca y retrocede. Privilegiar las estructuras rancias por sobre una democratización real de la política, le dio una enorme ventaja a la derecha reconvertida como “lo nuevo”.
Un importante sector de la militancia kirchnerista está pensando en aceptar un reordenamiento del PJ como fuerza de oposición bajo una conducción más conservadora. El propio Scioli, personajes como Urtubey, Gioja y los “renovadores” liderados por Sergio Massa aparecen como posibles protagonistas. Humildemente decimos que esta salida sería persistir en el camino equivocado.
Si el kirchnerismo fue la vía de reconciliación de amplios sectores de la población con la militancia y en las camadas más jóvenes el primer contacto con la política, es necesario desatar y liberar esa energía en lugar de maniatarla a quienes entienden la construcción política exclusivamente como fuerza electoral y administración burocrática de los recursos del Estado.
Nuestra actitud debe ser firme, pero también autocrítica y fraterna. El debate en cuestión no es un tema del kirchnerismo, sino de todo el campo popular. Cada uno con sus responsabilidades, bien diferentes, claro está. Pero de ninguna manera nuestra construcción y nuestra política son ajenas a los dilemas planteados. Ni quienes pronosticaron un “ascenso de la izquierda” cuando lo que ocurría era lo opuesto, un “ascenso de la derecha”, ni quienes mantuvieron una posición desde el progresismo anti-K.
Flaco favor le haríamos al campo popular si nos paráramos en el pedestal a decir “vieron que teníamos razón” autoproclamándonos una autoridad política que aún no nos hemos ganado. Pocas cosas han sido más inútiles en la tradición de la militancia de izquierda de nuestro país. La militancia que formó parte del kirchnerismo deberá balancear los problemas de engordar y apostar a un empresariado nacional que como siempre termina abrazado al liberalismo. También deberá balancear no haber apostado decisivamente a la participación popular.
Pero las fuerzas populares que no formamos parte del FPV también debemos plantearnos las razones de no haber logrado una mayor incidencia en la disputa de poder en nuestro país y el haber subestimado momentos de conflicto en que, visto desde hoy, se hace evidente que estaba en juego más de lo que parecía para el futuro de nuestro país.
Una oportunidad para construir una Izquierda Popular
El nuevo escenario abre enormes desafíos para construir el proyecto de la Izquierda Popular. PATRIA GRANDE en su último Plenario Nacional de Delegados y Delegadas definió como orientación fundamental para la etapa la búsqueda de una confluencia con lo mejor del proceso político argentino desde el 2001 hasta aquí. La mayor parte se expresa en la militancia y la base social del kirchnerismo.
Para llevar adelante esta política, el debate que abierto con el triunfo de la derecha es fundamental. ¿Qué tipo de oposición y alternativa presentaremos al macrismo? ¿Será una versión más moderada del FPV liderada por el sector más conservador del PJ? ¿O será una nueva plataforma política nacida de la confluencia de lo mejor del kirchnerismo con la izquierda a la que no le da lo mismo? ¿Se atreverá ese posible reagrupamiento a colocar como central la participación popular, la transformación del Estado y la democratización del sistema político? ¿Y a desafiar el horizonte de un “capitalismo con inclusión”? Para dar esa batalla resulta imprescindible afianzar y fortalecer la construcción de la Izquierda Popular en la Argentina, hacerla crecer, profundizar su inserción social y perfeccionar su capacidad de intervención política. Los próximos años presentan una gran oportunidad para ello. ¡Vamos a hacerlo!
Por Itai Hagman
Esta gente parece que no sacó nada en limpio de las experiencias históricas de la izquierda en Argentina.
Si Hagman y compañía nos quieren vender que la "izquierda" kirchnerista va a terminar incorporándose al menjunge de Patria Grande, allá ellos.
Cualquiera con 2 dedos de frente se da vuelta que, en el mejor de los casos, estarían negociando su capitulación final en el kirchnerismo residual.
Patético.
Blood- Revolucionario/a
- Cantidad de envíos : 1284
Reputación : 1456
Fecha de inscripción : 11/09/2011
Localización : En todos los barrios, junto a la clase obrera♫
- Mensaje n°637
Re: ¿A quién van a votar en las elecciones 2015?
Estuve ausente desde las PASO nacionales. Pasaron las PASO, la primera vuelta y el ballotage... y no hay casi ningún hilo nuevo publicado. Ay, ay, ay; esto necesita algo de acción...
Hay una tendencia democratizante al interior del movimiento obrero actual, la cual fue explotada por la lista del PTS (Lista Renovar y Fortalecer) al interior del Frente de Izquierda en Agosto contra el resto del frente (Lista Unidad). Me cito a mí mismo, en mi [ante]último mensaje, de Agosto:
Los prejuicios anti-política, anti-partido, pueden ser utilizados para desenvolver una crítica socialista que los supere, pero también pueden ser canalizados por expresiones derechistas. Ciudadanos en España y Cambiemos en Argentina son los mayores ejemplos.
La victoria de Macri es la victoria del planteo de la renovación del cuadro de mando de la burguesía, del cambio superfluo, frente al agotamiento del régimen de emergencia kirchnerista. El gobierno de Cristina Kirchner fue el intento de resolver la tendencia a la disolución del régimen político, posterior al colapso del 2001, estableciendo un arbitraje personal que, fue carcomido por su propio agotamiento (Bonapartismo tardío). El gobierno de los decretos de necesidad y urgencia, de la imposición autoritaria por sobre las reglas republicanas. Pero Mauricio Macri no va a instaurar una restauración republicana...
Una sola provincia, Córdoba, fue clave para desequilibrar los porcentajes nacionales en su victoria pírrica. Ni siquiera logró hegemonizar la provincia de Buenos Aires, donde alzó a Vidal contra Aníbal Fernández por las luchas internas, de camarilla, al interior del Frente para la Victoria; pero también gracias a esa misma fuerza de la tendencia democratizante (puesto que Fernández es un hombre de la policía, ligado a las corruptelas y al crimen organizado, al narcotráfico e incluso, para el electorado más progresista-izquierdista, a la represión asesina anti-activista).
Profundicemos en esto: El Kirchnerismo no es un movimiento popular de masas, sino una camarilla. Y Scioli no es un hombre de la camarilla de Cristina Kirchner, sino que conforma el aparato pejotero de la Liga de Gobernadores. La imposición de un hombre duro de la camarilla kirchnerista (Zanini) como vice-presidente fue un golpe palaciego al interior del oficialismo. Se desató una guerra de punteros en el Conurbano. Los hombres de Zanini combatieron a los hombres de Scioli, dentro de los cuales encontramos a los Barones del Conurbano; muchos de los cuales fueron derrotados en las PASO. Su fin es otro producto del carácter democratizante del rol de las masas en estas elecciones.
El kirchnerismo ya estaba encaminado en la estrategia de "la transición ordenada" desde fines del año pasado. Su Operativo Retorno descansaría en un Congreso copado y Buenos Aires, bajo la gobernatura de Aníbal Fernández, como espacio de reorganización. Fracasaron . Ahora la camarilla kirchnerista queda reducida de vuelta a su Santa Cruz natal (retenida apenas gracias a la ley de lemas y manejos similares) y a tres puestos de poder por fuera [formalmente] del Ejecutivo:
El macrismo ahora debe desarmar el armado kirchnerista. Los republicanos ahora atacan, llevándole a la contra a la constitución, los puestos que deberían estar por fuera del control del Ejecutivo. Y el kirchnerismo que los presentaba como espacios de militancia nacional y popular, ahora habla de respeto a la institucionalidad. Los discursos son accesorios para defender un interés social, o camuflar su arbitraje o su gerencia. La burguesía no hace fanatismos ideológicos, hace negocios.
El fenómeno al que asistimos ahora es el de la victoria de gobiernos derechistas sin una derechización de la Sociedad. Lo repito, por si no quedó tan explícito: Es el falso "progresismo" el que nos dejó en el umbral de la Derecha. El macrismo es una banda de derechistas improvisados que ha logrado explotar sus limitaciones letales. Macri nació a la política porteña, como jefe de gobierno, gracias al Cromañón del "progresista" Ibarra. El único progresismo consecuente, que combate y prepara el desenvolvimiento progresivo de la humanidad, es la organización de los trabajadores en su propia defensa contra los promotores de la barbarie.
La Bolsa recibió la victoria de Macri con una caída. No porque Macri no vaya a gobernar en favor de los intereses capitalistas, sino porque su margen de victoria es pírrico, como dije antes, y no garantiza que pueda hacer pasar al ajuste en las condiciones que esperaban estos especuladores. Detrás de los tipos de cambio y las más diversas tasas económicas se encuentra una relación social de explotación, explotación que el Capital busca profundizar como salida a la bancarrota capitalista internacional.
El primer problema político de Macri, sin embargo, es cómo va a gobernar. Es un problema que quizás se fue desenvolviendo desde que triunfó en las elecciones hasta el 10 de Diciembre con más intensidad que a partir de hora.
Recordemos esto: Las PASO de la Ciudad vieron dos listas del PRO, una encabezada por Michetti y otra por Larreta. El planteo de Michetti era el de un gobierno de coalición, y se negaba a ser coronada vice-presidente de Macri. Su cargo lo debía ocupar un hombre duro de otro partido, quizás del Sciolismo o el Kirchnerismo, en un gobierno de unidad nacional para hacer pasar el ajuste. El cable de transmisión del macrismo hardline fue Rodríguez Larreta, quien representó mejor los negociados más jugosos que administraba Macri (El ejemplo por antonomasia es Caputto y las constructoras e inmobiliarias especuladoras de la Ciudad). El Papa apoyó en esas PASO a Michetti y a un activista unido a la burocracia sindical (Gustavo Vera), y... fue el principal derrotado
Sánz, el hombre de la UCR que armó el acuerdo entre el Radicalismo y el PRO, iba a tener el cargo de Ministro de Justicia el ministro encargado de dar caza judicial a la camarilla kirchnerista por sus corruptelas). Renunció incuso antes de asumir. Macri no era flexible a darle todas las carteras que quería, ni a formar un gobierno de coalición. Pero el PRO es una minoría parlamentaria. ¿Será otro gobierno de camarilla? ¿Otro gobierno apoyado en el poder personal de Macri y su camarilla, como el kirchnerismo?
Hay una crisis en puerta entre Macri y su base social: Los sojeros (quienes, dicho sea de paso, le garantizaron el triunfo en el interior de la provincia de Buenos Aires). Es una base social comprada sobre la base de la quita de las retenciones, pero al costo de agudizar severamente la crisis fiscal. Respetar esta promesa de campaña significa un gobierno agónico, sin recursos, que termine tardíamente siendo lanzado a una pelea con los sojeros o a extraer esa sangre que le falta vía tarifazos e impuestazos contra los que vivimos de nuestro trabajo. El Presupuesto 2016 y los primeros decretos de necesidad y urgencia (al mejor estilo kirchnerista) se deslizan por la última opción.
Tenemos que discutir un programa defensivo para enfrentar el ajuste: desenvolvamos la consigna del doble aguinaldo o el bono de fin de año y la defensa a la lucha de Cresta Roja en nuestros lugares de laburo o de estudio. En nuestras redacciones, en nuestras fábricas, en nuestras oficinas. El kirchnerismo fantasea discursivamente con ser "la resistencia", pero su burocracia sindical fue la que respetó la tregua electoral de Macri y Scioli, acompañando el ajuste que ahora continuará Macri. Vidal obtuvo un pacto de gobernabilidad en el Conurbano. Y esto es porque en última instancia, más allá de sus luchas de facción, todos son los funcionarios al orden del mismo interés social: La salida capitalista a la crisis por la vía de un ataque anti-obrero en toda línea. La única salida en nuestra defensa es, pues, el planteo anti-capitalista, obrero y socialista.
Hay una tendencia democratizante al interior del movimiento obrero actual, la cual fue explotada por la lista del PTS (Lista Renovar y Fortalecer) al interior del Frente de Izquierda en Agosto contra el resto del frente (Lista Unidad). Me cito a mí mismo, en mi [ante]último mensaje, de Agosto:
Blood escribió:[...]
La lectura de Razón y Revolución [...] estuvo más adelantada que la mía. Ellos leyeron en la misma realidad que el PTS estaba haciendo una campaña dirigida al sector más atrasado de las masas (interpelando a las mujeres y los jóvenes, al vecino, al ciudadano) y efectivamente fueron democratizantes y con dejos republicanos, à la Zamora. Utilizaron ese estado en la consciencia de la clase obrera contra su vanguardia, en palabras de RyR. Captaron la onda PODEMOS, y sobre esa base consiguieron más votos que la Lista Unidad.
La figura combativa, del negro piquetero, nos jugó en contra. Raquel Blas, el Perro Santillán, Néstor Pitrola y nuestra Lista Unidad completa se vió perjudicada. El voto a Zamora es, precisamente, el voto ciudadano. El sector al que le gusta lo bueno, le gustan las medidas progresistas, pero no se banca el piquete. Ese sector zamorista del Frente de Izquierda pudo captar mejor la sintonía de la Sociedad
Pero cambiar la estrategia del leninismo a cambio de un triunfo electoral ahora es disolver el partido revolucionario en el electoralismo. Es lo que hizo el morenismo. Cuando las masas votaban a Perón, se hicieron peronistas. Aunque voten a PODEMOS, no podemos ser PODEMOS [...]
Los prejuicios anti-política, anti-partido, pueden ser utilizados para desenvolver una crítica socialista que los supere, pero también pueden ser canalizados por expresiones derechistas. Ciudadanos en España y Cambiemos en Argentina son los mayores ejemplos.
La victoria de Macri es la victoria del planteo de la renovación del cuadro de mando de la burguesía, del cambio superfluo, frente al agotamiento del régimen de emergencia kirchnerista. El gobierno de Cristina Kirchner fue el intento de resolver la tendencia a la disolución del régimen político, posterior al colapso del 2001, estableciendo un arbitraje personal que, fue carcomido por su propio agotamiento (Bonapartismo tardío). El gobierno de los decretos de necesidad y urgencia, de la imposición autoritaria por sobre las reglas republicanas. Pero Mauricio Macri no va a instaurar una restauración republicana...
Una sola provincia, Córdoba, fue clave para desequilibrar los porcentajes nacionales en su victoria pírrica. Ni siquiera logró hegemonizar la provincia de Buenos Aires, donde alzó a Vidal contra Aníbal Fernández por las luchas internas, de camarilla, al interior del Frente para la Victoria; pero también gracias a esa misma fuerza de la tendencia democratizante (puesto que Fernández es un hombre de la policía, ligado a las corruptelas y al crimen organizado, al narcotráfico e incluso, para el electorado más progresista-izquierdista, a la represión asesina anti-activista).
Profundicemos en esto: El Kirchnerismo no es un movimiento popular de masas, sino una camarilla. Y Scioli no es un hombre de la camarilla de Cristina Kirchner, sino que conforma el aparato pejotero de la Liga de Gobernadores. La imposición de un hombre duro de la camarilla kirchnerista (Zanini) como vice-presidente fue un golpe palaciego al interior del oficialismo. Se desató una guerra de punteros en el Conurbano. Los hombres de Zanini combatieron a los hombres de Scioli, dentro de los cuales encontramos a los Barones del Conurbano; muchos de los cuales fueron derrotados en las PASO. Su fin es otro producto del carácter democratizante del rol de las masas en estas elecciones.
El kirchnerismo ya estaba encaminado en la estrategia de "la transición ordenada" desde fines del año pasado. Su Operativo Retorno descansaría en un Congreso copado y Buenos Aires, bajo la gobernatura de Aníbal Fernández, como espacio de reorganización. Fracasaron . Ahora la camarilla kirchnerista queda reducida de vuelta a su Santa Cruz natal (retenida apenas gracias a la ley de lemas y manejos similares) y a tres puestos de poder por fuera [formalmente] del Ejecutivo:
- El AFSCA, con Sabatella, gestor no sólo de un aparato de dominación ideológica que garantiza la reproducción de las relaciones sociales, sino de negociados jugosos con el capital nacional e internacional (imperialista). Telefónica-Telefé fue, a mí parecer, la marca extranjera leitmotiv del kirchnerismo. El cambio de funcionarios que reclama el macrismo anticipa que buscará establecer un dominio similar al que el kirchnerismo quiso imponer sobre los medios de comunicación. El manejo de la pauta publicitaria de la Ciudad repite, aunque a socios distintos, la discrecionalidad que el kirchnerismo utilizó con la pauta del gobierno nacional. Es probable, también, que se avance en una nueva ley de medios, algo que el propio gobierno actual dejó picando al replantear la participación de las telefónicas en el negocio audiovisual. [Cita]
- El BCRA, con Vanoli, cuya posición es una traba para la política monetaria-fiscal de cualquier gobierno que no sea el de la camarilla kirchnerista. Su final es necesario. El único punto de diferencia entre la "dependencia" de Vanoli y la ‘independencia’ de Sturzenegger es que el primero pagó la deuda externa usando las reservas del BCRA y su sucesor lo hará tomando nueva deuda. Pero la diferencia acá también debe relativizarse, pues los swap dados por China en este último año también constituyen una deuda que deberá ser oportunamente afrontada. [Cita]
- La Procuración General, con Gils Carbó, la trama del cerco judicial recibe un plot twist digno de Christopher Nolan. No es meramente cierta garantía de impunidad judicial, es un lugar clave en el Estado. Al respecto de las luchas al interior del Poder Judicial, que refutan la mistificada ideología republicana de la separación de Poderes podría explayarme sin cansarme durante horas y horas...
El macrismo ahora debe desarmar el armado kirchnerista. Los republicanos ahora atacan, llevándole a la contra a la constitución, los puestos que deberían estar por fuera del control del Ejecutivo. Y el kirchnerismo que los presentaba como espacios de militancia nacional y popular, ahora habla de respeto a la institucionalidad. Los discursos son accesorios para defender un interés social, o camuflar su arbitraje o su gerencia. La burguesía no hace fanatismos ideológicos, hace negocios.
El fenómeno al que asistimos ahora es el de la victoria de gobiernos derechistas sin una derechización de la Sociedad. Lo repito, por si no quedó tan explícito: Es el falso "progresismo" el que nos dejó en el umbral de la Derecha. El macrismo es una banda de derechistas improvisados que ha logrado explotar sus limitaciones letales. Macri nació a la política porteña, como jefe de gobierno, gracias al Cromañón del "progresista" Ibarra. El único progresismo consecuente, que combate y prepara el desenvolvimiento progresivo de la humanidad, es la organización de los trabajadores en su propia defensa contra los promotores de la barbarie.
La Bolsa recibió la victoria de Macri con una caída. No porque Macri no vaya a gobernar en favor de los intereses capitalistas, sino porque su margen de victoria es pírrico, como dije antes, y no garantiza que pueda hacer pasar al ajuste en las condiciones que esperaban estos especuladores. Detrás de los tipos de cambio y las más diversas tasas económicas se encuentra una relación social de explotación, explotación que el Capital busca profundizar como salida a la bancarrota capitalista internacional.
El primer problema político de Macri, sin embargo, es cómo va a gobernar. Es un problema que quizás se fue desenvolviendo desde que triunfó en las elecciones hasta el 10 de Diciembre con más intensidad que a partir de hora.
Recordemos esto: Las PASO de la Ciudad vieron dos listas del PRO, una encabezada por Michetti y otra por Larreta. El planteo de Michetti era el de un gobierno de coalición, y se negaba a ser coronada vice-presidente de Macri. Su cargo lo debía ocupar un hombre duro de otro partido, quizás del Sciolismo o el Kirchnerismo, en un gobierno de unidad nacional para hacer pasar el ajuste. El cable de transmisión del macrismo hardline fue Rodríguez Larreta, quien representó mejor los negociados más jugosos que administraba Macri (El ejemplo por antonomasia es Caputto y las constructoras e inmobiliarias especuladoras de la Ciudad). El Papa apoyó en esas PASO a Michetti y a un activista unido a la burocracia sindical (Gustavo Vera), y... fue el principal derrotado
Sánz, el hombre de la UCR que armó el acuerdo entre el Radicalismo y el PRO, iba a tener el cargo de Ministro de Justicia el ministro encargado de dar caza judicial a la camarilla kirchnerista por sus corruptelas). Renunció incuso antes de asumir. Macri no era flexible a darle todas las carteras que quería, ni a formar un gobierno de coalición. Pero el PRO es una minoría parlamentaria. ¿Será otro gobierno de camarilla? ¿Otro gobierno apoyado en el poder personal de Macri y su camarilla, como el kirchnerismo?
Hay una crisis en puerta entre Macri y su base social: Los sojeros (quienes, dicho sea de paso, le garantizaron el triunfo en el interior de la provincia de Buenos Aires). Es una base social comprada sobre la base de la quita de las retenciones, pero al costo de agudizar severamente la crisis fiscal. Respetar esta promesa de campaña significa un gobierno agónico, sin recursos, que termine tardíamente siendo lanzado a una pelea con los sojeros o a extraer esa sangre que le falta vía tarifazos e impuestazos contra los que vivimos de nuestro trabajo. El Presupuesto 2016 y los primeros decretos de necesidad y urgencia (al mejor estilo kirchnerista) se deslizan por la última opción.
Tenemos que discutir un programa defensivo para enfrentar el ajuste: desenvolvamos la consigna del doble aguinaldo o el bono de fin de año y la defensa a la lucha de Cresta Roja en nuestros lugares de laburo o de estudio. En nuestras redacciones, en nuestras fábricas, en nuestras oficinas. El kirchnerismo fantasea discursivamente con ser "la resistencia", pero su burocracia sindical fue la que respetó la tregua electoral de Macri y Scioli, acompañando el ajuste que ahora continuará Macri. Vidal obtuvo un pacto de gobernabilidad en el Conurbano. Y esto es porque en última instancia, más allá de sus luchas de facción, todos son los funcionarios al orden del mismo interés social: La salida capitalista a la crisis por la vía de un ataque anti-obrero en toda línea. La única salida en nuestra defensa es, pues, el planteo anti-capitalista, obrero y socialista.