SIOUX 89 escribió:bien aventurados los pobres porque de ellos sera el reino de los cielos. (mateo 5:13)
Claro . Así que ya saben pobres del mundo, ni se les ocurra rebelarse, que tienen el paraíso asegurado!
SIOUX 89 escribió:bien aventurados los pobres porque de ellos sera el reino de los cielos. (mateo 5:13)
IonaYakir escribió:SIOUX 89 escribió:bien aventurados los pobres porque de ellos sera el reino de los cielos. (mateo 5:13)
Claro . Así que ya saben pobres del mundo, ni se les ocurra rebelarse, que tienen el paraíso asegurado!
Respuesta del Vaticano a la Teología de la Liberación
El Papa Juan Pablo II solicitó de la Congregación para la Doctrina de la Fe dos estudios sobre la Teología de la Liberación, Libertatis Nuntius de 1984 y Libertatis Conscientia de 1986. En ellos se argumentaba básicamente que, a pesar del compromiso radical de la Iglesia con los pobres, la disposición de la Teología de la Liberación a aceptar postulados de origen marxista o de otras ideologías políticas no era compatible con la doctrina, especialmente en lo referente a que la redención sólo era posible alcanzarse con un compromiso político.
En ese momento el Prefecto de la Congregación era el entonces Cardenal Ratzinger (hoy Papa Benedicto XVI), crítico de la Teología de la Liberación. Señaló en dichos documentos lo que consideraba "errores de algunas formas de la Teología de la Liberación", que según conclusiones de la Congregación bajo su dirección son:
1. Desde un punto de vista teológico, el análisis marxista no es una herramienta científica para el teólogo, que debe, previo a la utilización de cualquier método de investigación de la realidad, llevar a cabo un examen crítico de naturaleza epistemológica más que social o económico.
2. El marxismo es, además, una concepción totalitaria del mundo, irreconciliable con la revelación cristiana, en el todo como en sus partes.
3. Esta concepción totalitaria impone su lógica y arrastra las "teologías de la liberación" a un concepto de la praxis que hace de toda verdad una verdad partidaria, es decir, relativa a un determinado momento dialéctico.
4. La violencia de la lucha de clases es también violencia al amor de los unos con los otros y a la unidad de todos en Cristo; es una concepción puramente estructuralista, para legitimar esa violencia.
5. Decir que Dios se hace historia, e historia profana, es caer en un inmanentismo historicista, que tiende injustificadamente a identificar el Reino de Dios y su devenir con el movimiento de la liberación meramente humana, lo que está en oposición con la fe de la Iglesia.
6. Esto entraña, además, que las virtudes teologales de la fe, la esperanza y la caridad reciban un nuevo contenido como "fidelidad a la historia", "confianza en el futuro", y "opción por los pobres" que en realidad les niega su sustancia teológica.
7. La politización de las afirmaciones de la fe y de los juicios teológicos lleva a la aceptación de que un hombre, en virtud de su pertenencia objetiva al mundo de los ricos, es, ante todo un enemigo de clase que hay que combatir.
8. Todo eso lleva a un clasismo intolerable dentro de la Iglesia y a una negación de su estructura sacramental y jerárquica, 'hendiendo al Cuerpo Místico de Cristo en una vertiente "oficial" y otra "popular", ambas contrapuestas.
9. La nueva hermenéutica de los teólogos de la liberación conduce a una relectura esencialmente política de las Escrituras y a una selectividad parcial y mendaz en la selección de los textos sacros, desconociendo la radical novedad del Nuevo Testamento, que es liberación del pecado, la fuente de todos los males.
10. También entraña el rechazo de la Tradición como fuente de la fe y una distinción inadmisible entre el "Jesús de la Historia" y el "Jesús de la Fe", a espaldas del magisterio eclesiástico».[11]
Los procesos y sanciones contra destacados teólogos de la liberación como Leonardo Boff, a partir de 1985 o Jon Sobrino en 2007, han concretado y continuado los ataques contra la Teología de la Liberación.
no es un tema que conozca en profundidad, sin embargo me ha llamado la atención el artículo que he colgado, sobre todo por descubrir que estan siendo excomulgados, lo cual me hace creer que es un movimiento con ámplio poder de comunicación todavía.No se puede obviar que hay millones de creyentes en todo el mundo, especialmente en Sudamérica, así que, como dices, quizás sí que es un compañero útil (bueno, también perverso porque es la cara amable de la iglesia y personalmente no me parece demasiado liberalizador la necesidad de una iglesia y el funcionamiento de las grandes iglesias me parece aberrante en grado sumo, a parte de lo que opino sobre las explicaciones que dan las grandes religiones sobre el mundo ).Chus Ditas escribió:Hay que saber de qué se está hablando y utilizar las palabras en su significado real y no en lo que nos creemos que son o en lo que nos parece. En un chat o entre coleguillas tomando unas cervezas, puede valer, pero en un foro en el que se supone que se quiere aprender y opinar para que los demás aprendan, hay que ser riguroso. No hay católicos marxistas. Es imposible. Ni desde el punto de vista católico ni desde el punto de vista marxista. El que es católico debe obediencia a la Iglesia católica, apostólica y romana, tanto en los preceptos como en las recomendaciones que se hacen cada poco tiempo. ¿Hay que concretar acerca de lo que significa la secta cristiana más numerosa, de lo que ha supuesto en la historia de la humanidad, de su filosofía e ideología política puramente medievales y de su negación de la conciencia del ser humano, sustituyendo el raciocinio por la obligación de seguir el dogma dictado por un pontífice vitalicio, con sede en Roma, en el Vaticano?. Recordemos que en plena guerra fría, en 1949, la Iglesia católica excomulgó (expulsó) a los comunistas de su seno.
Realmente yo no se lo que es el cristianismo, más allá de una especie de histeria individual en lo político que acalla muy bien la propia conciencia y que la ideología pequeñoburguesa considera molón y sinónimo de respetabilidad, pero dado que está extendido en muchas partes del mundo como supuesto enfoque político progresista, en determinadas situaciones históricas algunos partidos comunistas, malinterpretando en muchos casos la opinión de los maestros que hablaban de que la religión debería pertenecer al ámbito de lo puramente personal y privado, han intentado atraer a aquellos que se consideran cristianos hacia posturas reformistas, revisionistas y simplemente electoralistas en la mayoría de los casos. Bueno, así les fue a los partidos comunistas europeos que defendían aquello de cristianos por el socialismo.
¿La teología de la liberación?. No deja de ser una manera de intentar abordar la contradicción entre idealismo y materialismo, de manera tal que no llegan a dar el definitivo y necesario paso de integrar las filas marxistas. Más bien debería conceptuarse como un compañero de viaje útil que pudo tener relevancia entre las clases populares de América de haber prosperado y que hoy en día parece bastante agotado.