Hola Gagarín, sé fiel a tu esencia pero sin ser radical. A lo largo de la vida irás comprobando como el mundo en el que vivimos todo se mueve a través de influencias, de amistades y amiguismos. Los jueces que aprueban la mayoría de oposiciones en este país, tiene unos apellidos determinados y, curiosamente, la mayoría son mediocres profesionales en su ejercicio, carentes de la más mínima ética (aunque no se puede generalizar porque también hay buenos profesionales), pero son puestos ahí porque a este sistema le interesa controlar el poder desde la administración de la justicia. Cuando a veces critican a la URSS de impermeable y de burócrata, me dan ganas de reír, puesto que los líderes de entonces dieron un ejemplo de sencillez e igualitarismo desde los cargos que ocupaban. El invento del culto a la personalidad intentó mitificar las grandes diferencias entre el ejercicio del poder y la praxis demócrata. Como he dicho muchas veces, es mil veces mejor un estado liderado por un partido comunista que una dictadura parlamentaria en la que la eterna lucha entre el manejo de los poderes fácticos, acaparan el espectro político y judicial.
Yo nunca he cambiado y me han ofrecido puestos de trabajo cómodos y bien remunerados a través de amiguismos que vulneraban las reglas de juego y las condiciones de mérito, igualdad y capacidad. Mis padres siempre me intentaron convencer de que me uniera al sitema y, sin embargo, estoy orgulloso de no haberlo hecho y ser fiel en la defensa de eses valores, y como yo, somos miles de personas las que compartimos este punto de vista en este caso concreto.
Un saludo Gagarín y no te hagas mala sangre, no merece la pena.
Yo nunca he cambiado y me han ofrecido puestos de trabajo cómodos y bien remunerados a través de amiguismos que vulneraban las reglas de juego y las condiciones de mérito, igualdad y capacidad. Mis padres siempre me intentaron convencer de que me uniera al sitema y, sin embargo, estoy orgulloso de no haberlo hecho y ser fiel en la defensa de eses valores, y como yo, somos miles de personas las que compartimos este punto de vista en este caso concreto.
Un saludo Gagarín y no te hagas mala sangre, no merece la pena.