YA que se esta hablando de nuevo de eliminar ceros a la moneda colombiana les presento lo que dice al respecto el profesor Traian Romanescu de cómo los comunistas hacían estos cambios en los países que ellos dominaban con el fin de que el Estado que era la elite sionista controlara el dinero del país y se quedara con buena parte de el.
Ellos lo llamaban estabilización monetaria
Venezuela , mexico han hecho lo mismo lo cual se ha traducido en inflación y perdida de valor de la moneda frente a las demás del resto del mundo, ojala no sea lo que va a pasar por estos lados, pero de un descendiente de los Rothshild, poco se puede esperar.
Estas directivas son los protocolos originales es decir el plan de dominio del sionismo.
Gab
DIRECTIVA N9 20
(El lector encontrará en esta directiva las bases de la política económica de los regímenes comunistas de hoy).
"Hablaremos hoy sobre el programa económico que hemos dejado al final de nuestra exposición, por ser el más difícil, más alto y más de¬cisivo punto de nuestro programa.
"Empezando su estudio, os recordaré que el total de nuestras ac¬ciones es cuestión de números.
"Cuando llegue nuestro dominio, nuestro gobierno dictatorial evitará cargar demasiado a las masas populares con impuestos, en bien de su propia defensa, y no olvidará su papel de padre y protector.
"Pero, dado que el organismo gubernamental es caro, debe, a pesar de todo eso, encontrar los medios (fondos) necesarios. Este es el mo¬tivo debido al cual prepararemos con gran cuidado el equilibrio eco¬nómico.
"En nuestro Estado, el rey (jefe) será el símbolo legal de la pro¬piedad de todo lo que se encuentre en su Estado".
(Con otras palabras, el ¡efe del Estado dominado por la jude¬ría será el propietario legal de todo, igual que en el Estado comu¬nista de hoy. Stalin, por ejemplo, y cualquier otro jefe comunis¬ta de Estado ha sido el propietario "legal" de todo en el respectivo país. Es exactamente lo que se dice en el párrafo anterior, sola¬mente que aún no dan en llamarse reyes).
"Podrá por consiguiente recurrir a la confiscación legal de todas las cantidades de dinero que crea necesario para regular la circulación mo¬netaria normal en el interior del Estado".
(Este procedimiento de confiscación "legal" del dinero de los súbditos es larga y periódicamente utilizado por los judío-comunis¬tas, dentro de todos los países sojuzgados. Es conocido bajo el tí¬tulo de "Estabilización Monetaria" y consiste en la emisión de un nuevo tipo de dinero, que debe reemplazar al antiguo, pero el cambio efectuado por los bancos de Estado no se hace a la paridad de unidad contra unidad, sino que el ciudadano recibe para cien o mil unidades antiguas, una nueva, sin que los precios sean reduci¬dos cuantitativamente en la misma proporción. Por ejemplo, si por una "estabilización monetaria" se reemplazara a los actuales dó¬lares con dólares nuevos, entregándose un dólar nuevo al portador, contra 100 dólares antiguos entregados por él al banco, deberá tam¬bién el precio de un artículo que antes costaba 100 dólares ser reducido a un dólar. Pero eso no se hace.
(El precio sube generalmente al doble, es decir, que el poder de adquisición de una persona que tenía una X cantidad de dinero antes de la estabilización, baja a la mitad después de ella. La con¬fiscación "legal" efectuada por el Estado consiste en el hecho de que cuando se hace la "estabilización", el Estado no cambia todo el dinero del cual dispone cada súbdito, sino una cantidad fija, muy restringida, calculada para cubrir las necesidades estrictas de una familia para un mes. Pero el Estado emite una cantidad de dinero cuyo valor real es igual a la cantidad de dinero que va a retirarse de la circulación por el hecho de declararse a la moneda existente, fuera de circulación. La diferencia de dinero que se que¬da en las manos del Estado, después de: haberse efectuado los cam¬bios limitados, es una cantidad enorme. Esta es realmente una con¬fiscación del dinero de las masas populares.
(He aquí un ejemplo numérico, para entender el mecanismo de estas confiscaciones "legales" efectuarlas por los comunistas con la ayuda de las "estabilizaciones monetarias1'.
(La cantidad de dinero en circulación en un país es por ejemplo de 10,000 millones de unidades. La mayor parte de este dinero se encuentra en las manos cíe la población. Y naturalmente, unos ciu¬dadanos poseen más, otros menos, según sus ingresos. Entonces viene el Estado con su "estabilización", la cual presenta como una medida dirigida a "aumentar el bienestar del pueblo", aunque en realidad constituye un robo oficial. Anuncia que los ciudadanos recibirán una unidad nueva, contra 100 antiguas, pero solamente hasta 10,000 unidades, mientras que el ciudadano puede tener en su posesión 100,000 unidades antiguas. ¿Qué hace con el resto de 90,000 unidades? Las pierde, puesto que nadie tiene el valor de cambiarlas en su país comunista, aunque sea con una persona que no tenga dinero, ya que tiene miedo al castigo, porque se fe obli¬garía a justificar la posesión de tal cantidad. El Estado ha emiti¬do contra los 10,000 millones existentes en circulación, 100 millo¬nes de unidades nuevas, pero ésas no entran en las manos de la población, puesto que se cambia solamente una fracción del anti¬guo dinero en circulación, unos 20 por 100. El resto se queda en las manos del Estado, o sea que donde antes la población poseía el equivalente a 100 millones de dólares, hoy posee solamente el equivalente a 20 millones de dólares, y el resto de 80 millones, se quedan para el Estado. ¿Hay negocio mejor que ése?
(Por ejemplo en Rumania, debido a la invasión roja y al pillaje salvaje, se había llegado en 1945- 1946 a una inflación catastrófica. En 1947, los comunistas hicieron la primera "estabilización1' fijan¬do como cambio una unidad nueva, contra 20.0ÍIO antiguas, pero se limitó la cantidad que pudiera ser cambiada a tres millones y medio, para cada familia, aunque muchas familias poseían cente¬nares de millones. De este modo todo el mundo perdió la mayor parle de su dinero, que combinado con el aumento real de los pre¬cios, que siguió a la "estabilización", hizo fa vida mucho peor de como era antes, cuando debían ir con un saco de dinero para com-prar un pan. Una nueva "estabilización", es decir una nueva con¬fiscación del dinero público por el Estado se hizo en Rumania durante el año 1950 y fueron desastrosas para la población.)
Los impuestos serán recogidos sin molestias ni disturbios, en pro¬porción de tanto por ciento, en relación con la propiedad. Los ricos tienen el deber de comprender que deben poner parte de su excedente a la disposición del Estado, desde el momento que éste les garantiza el resto y el derecho de una ganancia honesta. Digo ganancia honesta, porque el control de las riquezas, prohibirá para siempre, cualquier pillaje legal".
(Siguiendo esta línea, los judío-comunistas han llegado más le¬jos suprimiendo totalmente la propiedad particular, pasando a ser propiedad del Estado todas las riquezas inmuebles).
"Esta Reconstrucción social debe venir desde arriba (del centro), puesto que ha llegado su tiempo y es necesaria como una ganancia de la Paz.
''El impuesto progresivo dará mucho mayor ingreso, que el impues¬to proporcional de. hoy, que nos es provechoso únicamente para pro¬vocar disturbios y descontentos entre los cristianos".
(Menciono que el "impuesto progresivo" sobre los ingresos cíe cada ciudadano, es la base del sistema de Imposición comunista utilizada en todos los países sojuzgados por los rojos).
"El poder en el cual se apoyará nuestro rey, se basará en el equi¬librio y la ganancia de la paz. Es necesario que los capitalistas judíos sacrifiquen una pequeña parte de sus ganancias para garantizar el fun¬cionamiento de la máquina gubernamental nuestra. Las necesidades de nuestro Estado deberán ser pagadas por aquellos cuyas ganancias les permite esto sin grandes esfuerzos.
"Esta medida hará desaparecer el odio del pobre contra el rico, en cuya figura, el pobre verá un poder económico útil al Estado, al man¬tenimiento de la paz y de la prosperidad, porque se percatará de que el rico es aquel que por sus medios hace posible estos bienes".
(En estos parágrafos, redactados en lenguaje sutil, los "ricos" son los judíos, y los pobres, los demás hombres, ya que así corno hemos visto en otras directivas, la judería busca por todos los me¬dios la destrucción de las riquezas cristianas y de los demás no-judíos, que deben ser transformados en una masa, incapaz de pen¬sar más que en el pan diario. Así lo han hecho los judío-comunistas y no debe olvidarse que en el Estado comunista, los judíos son los "capitalistas del Estado", ya que además de multitud de benefi¬cios, ellos ocupan los puestos clave en todas partes y cobran sa¬larios verdaderamente fantásticos, en relación con los demás em¬pleados. Por ejemplo, en 1950, un director de fábrica judío co¬braba en Rumania hasta 100,000 leí mensuales, mientras que un obrero de la misma fábrica, apenas llegaba a unos 4,000 leí, tra¬bajando hasta doce horas diarias. Naturalmente que eso no se sabe en Occidente, donde el comunismo es visto bajo un aspecto totalmente o casi totalmente falso, pero los pueblos sometidos co¬nocen tales detalles).
"El Regente no tendrá riqueza particular porque todo lo que existe en el Estado le pertenece, y de otra manera esto no tendría sentido.
"Los parientes del Regente, excepto sus herederos que serán también subvencionados por el Estado, tienen el deber de ocupar un servicio pú¬blico o de trabajar, para obtener el derecho de propiedad. Esta ven¬taja de pertenecer a la familia real, no debe ser utilizada como un motivo para el pillaje del tesoro del Estado.
"La compra de una propiedad cualquiera y el recibo de herencia se¬rán cargados con derechos de fiscalización progresiva.
" La Caja del Estado estará obligada a mantener siempre un capi¬tal en reserva, y el resto será puesto en circulación.
"Con ese capital guardado serán ejecutadas obras públicas. La eje¬cución de estas obras, con las reservas del Estado, PRODUCI¬RÁ (ATRAERÁ) LA FIDELIDAD DE LA CLASE OBRERA A LOS INTERESES DEL ESTADO Y DE LAS PERSONAS DIRIGENTES".
(Aquí tenemos de nuevo el sistema comunista 100 por 100, uti¬lizado en todos los países dominados por los rojos. Todos los pre¬supuestos de los actuales Estados comunistas tienen una reserva de dinero sin un destino especial. De este dinero se ejecutan de vez en cuando grandes obras públicas, capaces de atraer la aten¬ción de las masas, como presas hidráulicas, puentes, casas para los deportes, etc., en torno de las cuales se hace una enorme pro¬paganda, mostrándolas como "creaciones del Estado socialista", para el bienestar del "pueblo trabajador". Se entiende que estas obras no calientan mucho al pueblo y a los obreros, que quieren tener no puentes y presas gigantescas, sino casas propias, posibi¬lidades mejores de vida y libertad. Tales obras tienen un efecto propagandístico sobre las masas trabajadoras de los países libres, que informadas de que en los países dominados por los rojos se hacen grandes construcciones públicas, por ejemplo, piensan que esto es para el bien de las masas, sin darse cuenta que se persigue más un efecto propagandístico que el bien de alguien.
"Parte de estas sumas (de reserva) serán distribuidas para invencio¬nes e innovaciones de producción".
(Exactamente así hacen los comunistas. Muchos lectores han oído hablar, creo, del famoso "Premio Stalin" para invenciones, innovaciones, diversas obras de espíritu comunista, etc. He aquí de dónde ha tenido Stalin esta "inspiración" para crear su "premio").
"Bajo ninguna forma debe quedarse en la Caja del Estado ni una sola moneda más, excepto las sumas establecidas y calculadas de so¬bra, puesto que la moneda ha sido creada para circular y cualquier estancamiento de la circulación de la moneda, tiene una mala influen¬cia sobre el mecanismo del Estado, ya que ella (la moneda) está des-tinada a engrasar sus ruedas (del Estado). La falta de lubricante pue¬de impedir el funcionamiento regulador del mecanismo...
"El reemplazamiento de una parte del dinero por valores en papel, ha producido exactamente un estancamiento de esta naturaleza. Las consecuencias de este hecho son bastante sentidas ya.
"Las presentaciones oficiales, que consumen el tiempo precioso del gobernante por las recepciones que son impuestas por las usanzas de la etiqueta, serán suspendidas para dejar tiempo al gobernante para controlar y pensar. Su poder no dependerá más de favoritos que ro¬dean el trono para darle brillantez y prestancia, puesto que éstos tienen cuidado solamente de sus intereses personales y no de los intereses del Estado.
"Hemos provocado y provocaremos aún crisis económicas, con el pro¬pósito de acaparar del mercado el oro en circulación. Capitales colo¬sales han quedado y quedarán bloqueados, sustrayendo también el di¬nero de los Estados, que de este modo se ven obligados a dirigirse a nuestros banqueros, para encontrar dinero".
(El lector tiene aquí una confirmación más de que los judíos son los que han provocado todas las crisis económicas y posible¬mente provocarán otras en d futuro cercano. Los comunistas es¬tán seguros de que más tarde o más temprano estallará una nue¬va crisis económica en el mundo capitalista, y como los que diri¬gen al comunismo son judíos, ellos saben bien lo que trama la judería internacional).
"Estos créditos dificultarán la situación económica de los Estados, a causa del pago de los intereses hacia nosotros, avasallando de ese modo a los Estados nuestros capitales.
"La concentración de la industria en las manos de los capitalistas ha destruido la pequeña industria absorbiendo todas las energías del pue¬blo, y al mismo tiempo, los poderes del Estado".
"La circulación de hoy, del dinero, no corresponde generalmente a la suma que debe ser gastada por cada persona y de este modo no puede bastar para todas las necesidades de las obras.
"La circulación del dinero debe ser proporcional con el aumento de la población, y debe incluirse en esta proporción también a los niños, porque éstos consumen aun inmediatamente después de su nacimiento. "La revisión del modo de emisión monetaria es un problema princi¬pal para el mundo entero. Sabéis que el cambio de oro ha sido nefasto para los Estados que han adoptado este método, puesto que no puede bastar el consumo del dinero, tanto más cuanto nosotros habíamos sus¬traído de la circulación el máximo posible de la cantidad de oro existente. "Nosotros tenemos la obligación de introducir una moneda basada en el trabajo, moneda que no será ni de papel, ni de madera. Emi¬tiremos dinero en proporción con las necesidades corrientes, aumen¬tando la cantidad proporcionalmente con los nacimientos y aminorán¬dola proporcionalmente con los decesos.
"Cada edificio, cada barrio, tendrá en cuenta los nacimientos y los fallecimientos.
"Para que no surjan tardanzas1 en la entrega del dinero para las ne¬cesidades del Estado, las sumas y la fecha de su entrega, serán decidi¬das por decreto gubernamental. De este modo será deshecho el pro¬tectorado del ministerio de la Economía , que no podrá más proteger una provincia en el detrimento de otra.
"El presupuesto de los cristianos aumenta año tras año, y he aquí por qué: Tergiversan (los cristianos) este cálculo hasta la mitad del año, y después piden ampliaciones. Después se desea un presupuesto suplementario. Así se llega a un presupuesto de limpieza (desastroso). Y como el presupuesto del año próximo es elaborado sobre la base del total del presupuesto actual, la diferencia anual normal es de un 50 por ciento y e! presupuesto se triplica cada decenio.
"Gracias a estos métodos, que son aceptados debido a la falta de cuidado de los Estados cristianos, sus cajas están siempre vacías.
"Los créditos siguientes (los créditos que piden) han devorado los últimos restos (del dinero propio) y han llevado a todos los Estados al déficit.
"Cada crédito (deuda) hecho por los Estados, demuestra la debi¬lidad del Estado respectivo y la falta de comprensión de sus derechos. Los créditos cuelgan como la espada de Damocles sobre la cabeza de los gobernantes, que en lugar de obtener lo que es necesario, a través de impuestos temporales sobre sus súbditos, vienen con las manos ten¬didas, para pedir la limosna de nuestros banqueros.
"Las deudas exteriores son sanguijuelas que de ningún modo pueden ser despegadas de los cuerpos de los Estados, si no se despegan ellas so¬las o son arrancadas por el Estado respectivo mismo. Pero los Estados cristianos no las arrancan sino continuarán añadiendo otras, de tal ma¬nera que serán destruidos (los Estados) debido a esta sangría deseada. "De verdad ¿que otra cosa representa el crédito (la deuda) especial¬mente del exterior?
"El crédito es la emisión de sus recibos gubernamentales de banco (letras por las cuales se confirma la contratación de una deuda), que son sometidas a unos intereses proporcionales con la magnitud del ca¬pital prestado.
"Si el préstamo tiene un interés de 5 por ciento, durante 20 años el Estado respectivo pagará, sin tener ventaja alguna, un interés igual al crédito (con la suma prestada): en 40 años este interés es el doble del valor recibido; en 50 se triplica, y la deuda se queda siempre deuda. "Vemos por esto, que bajo el pretexto de unos impuestos particula¬res, los Estados sustraen hasta el último dinero de los pobres, para pa¬gar a los extranjeros ricos de los cuales han recibido dinero, en lugar de obtener ese dinero de sus países, sin pagar intereses.
"Mientras los préstamos fueran interiores, los cristianos no hacían otra cosa que transferir el dinero del bolsillo del pobre, al bolsillo del rico.
"Pero entonces nosotros (los judíos) hemos comprado a las personas que necesitábamos para que hagan créditos exteriores. Entonces todas las riquezas de los Estados han empezado a correr hacia nuestras cajas y todos los cristianos han empezado a prestarnos tributo de sumisión.
"Debéis saber que si la superficialidad de los cristianos en lo que se refiere a las asuntos de Estado, si la corrupción de sus ministros o la ig¬norancia de sus dirigentes en cuestiones económicas, ha impuesto a sus países dificultades de créditos que no pueden pagar, esto nos ha costa¬do mucho dinero y muchos esfuerzos.
"Nosotros no permitiremos el estancamiento del dinero y por este mo¬tivo no existirán obligaciones de Estado, excepto una serie de rentas con 1 por ciento, de tal manera que el poder del Estado respectivo no sea entregado a las sanguijuelas.
"El derecho de emitir acciones será reservado exclusivamente a las sociedades industriales, que no tardan en pagar los intereses de las ga¬nancias que obtienen, mientras que el Estado no obtiene ninguna ganan¬cia del dinero que loma en préstamo, puesto que él presta para gastar y de ningún modo para hacer negocios.
"Las acciones industriales serán compradas por el Estado, que de acreditado, como es ahora, se transformará en acreedor. Tal medida impedirá la paralización de la circulación monetaria".
(La mayoría de estos consejos financieros son aplicados hoy por los regímenes comunistas, naturalmente adaptándolos a la situa¬ción específica de cada país subyugado. Debido a la política mo¬netaria comunista, copiada de esta directiva, se resiente en esos países una permanente escasez de dinero y el Estado no emite más que solamente sumas calculadas para un consumo mínimo, por cada súbdito. Lo mismo, los Estados comunistas no efectúan prés¬tamos exteriores sino solamente raras veces. Por el contrario., cuan¬do necesitan grandes sumas de dinero, lanzan los "Préstamos de Estado Interiores", por los cuales todos los empleados y los obre¬ros son obligados a "prestar" al Estado una cantidad fijada en relación con su salario, aunque ese dinero está perdido, ya que el Estado no lo devuelve nunca y tampoco paga intereses. Este es también un "robo legal" semejante a las famosas "estabiliza¬ciones monetarias". Los judío-comunistas han invertido los pape¬les. En los países libres son algunos ciudadanos que roban al Es¬tado, mientras que en los comunistas, es el Estado el que roba a los ciudadanos. Les roba "legalmente").
"¡Cuan visible es la falta de discernimiento de los limpiamente ani¬males cerebros de los cristianos! Ellos obtienen préstamos de nosotros pagando intereses, sin pensar que serán forzados a sustraer este dinero cargado con las sumas adicionales de los intereses, del tesoro del Estado, para pagarnos a nosotros!
"¿Existe algo más sencillo que recibir el dinero que nos hace falta de nuestros súbditos? (los súbditos cristianos).
"Esto demuestra la superioridad general de nuestro espíritu, ya que hemos conseguido presentar el negocio de los préstamos bajo tal aspec¬to, que (los cristianos) prevean aun ganancias para ellos.
"Las cuentas que presentaremos entonces cuando llegue la hora, sien¬do iluminadas por la luz de la experiencia secular, cuyo material nos ha sido procurado por los Estados cristianos, se distinguirán por su cla¬ridad y exactitud, y mostraremos a todos la necesidad de nuestras medidas.
"Pondremos fin a los abusos gracias a los cuales tenemos a nuestra disposición a los cristianos, pero los cuales no es posible que sean per¬mitidos en nuestro Estado.
"Aplicaremos también nuestro sistema de contabilidad para que ni el gobierno, ni el más pequeño empleado pueda sustraer la más peque¬ña suma, de su destino, sin que eso sea conocido.
"Es imposible la gubernatura sin un plan pre-establecido".
(Por eso toda la actividad política, económica, etc., de los paí¬ses sojuzgados por el comunismo se desarrolla conforme a un plan bien concebido. Los planes políticos son naturalmente secretos, pe¬ro los planes económicos son bastante bien conocidos bajo el nom¬bre de los "planes quinquenales").
"Los héroes mismos se destruyen cuando siguen un camino sin tomar medidas de defensa".
"Los dirigentes cristianos a los cuales nosotros les aconsejamos para que discutan las necesidades de sus Estados durante recepciones oficia¬les, festejos y distracciones, son solamente instrumentos de nuestro go¬bierno secreto. Los informes de los favoritos que reemplazan a éstos (a los dirigentes) en los negocios, son formulados para ello por nuestros agentes y satisfacen siempre hasta a los más pretenciosos espíritus,, gra¬cias a augurios de que el futuro traerá economías.
"¿Economías? ¿de dónde? ¿De las deudas? podrían preguntarse éstos. Pero ellos no se lo preguntan, ya que conocen nuestras intenciones y nuestros planes...
"Sabéis a dónde ha llevado a los cristianos este descuido y estas irre¬gularidades económicas, a pesar de la maravillosa energía de sus pueblos..."