Comprendo camarada José y es claro que rompió las reglas del foro, de todos modos es una pena sólo al respecto de que no me gusta debatir con alguien que no tiene posibilidad de contestarme, pero el tema es que debido a cuestiones ocupacionales de estas últimas semanas que no me permiten entrar al foro todos los días es que aunque ya haya sido banneado Riazanov aún así, me limitaré a contestar algunas cosas que me preguntó o que quedaron pendientes por si a él o a otros camaradas les interesa leerlas.
En primer lugar, yo ya intuía parte de tu postura, es por eso que te pregunté si conocías Holloway, además de ver cierto pensamiento weberiano en tus argumentaciones, y aunque me dijiste que no lo conocés , te puedo decir que para mí, tu pensamiento está muy basado en él, e incluso en el de Hardt y Negri, y todo ese “marxismo autónomo o libertario” producto de ese posmodernismo que pretende tirar por la borda la historia y con ella la lucha de clases, llegando incluso a afirmar sin sonrojarse que el imperialismo ya pasó a la historia. O el modelo de Deleuze del rizoma en red sin centros, creyendo que se puede hacer una revolución por internet, cayendo en la falacia de creer que la web es un espacio “libre” y sin control alguno. A mí no me hubiera incomodado saber tu postura, por el contrario, hubiera sido un ahorro de tiempo, y… ¿qué es eso de que “debatir es un arte que supera a la ideología”? Eso es lo menos marxista que hay hermano, ya que te creés tan marxista por reivindicar a David Riazanov, siempre se debate desde una ideología y lo honesto es no ocultarla, y para mí el debate no es un “arte” es parte de la lucha político-ideológica, yo no debato por el amor al arte, debato para aclarar dudas pero también para defender una posición y también para preguntarse a uno mismo que defiende cuando se declara de tal o cual ideología, eso es lo honesto, sin usar tácticas de confusión e infiltración. Sino hubiera intervenido el camarada José estoy seguro que vos no me hubieras manifestado tan claramente tu postura ideológica, y mientras le recriminás que no te contesta la etimología de comunismo, vos tampoco me contestaste lo que te pregunté en mi último comentario, sobre cuáles son tus propias propuestas alternativas, cuáles son las acciones revolucionarias que vos proponés, además del “arte de debatir”, aplicando categorías como “masa” que me suenan igual que cuando Negri habla de “multitud”, u otras expresiones como “el poder popular nace como ente independiente” ¿y vos nos acusás de religiosos? “ente independiente” hablar así del poder popular es como hablar de la hipóstasis teológica. Por tanto si yo soy proto-burocrático, vos sos proto-ingenuo o lo que es peor proto-cómplice. Argumentar diciendo que el proceso revolucionario o la instancia instituyente de un nuevo sistema debe ser “democrático en sí” es de vuelta lo menos marxista que hay, o debo recordarte los debates entre Marx y Bakunin, Marx jamás renegó de la organización y la toma del poder del Estado, o debo recordarte también lo que decía Engels en “Sobre la autoridad” donde reconoce haciendo un análisis bien materialista de que todo estado nuevo surge a partir del terrorismo, de la dictadura de una clase sobre otra, esto ha sido así desde que el Estado existe y el nuevo estado socialista no escapa a esta realidad material e histórica, por eso digo que no aplicás la dialéctica, porque no consideras ni la historia, ni siquiera la aplicación táctica de la dialéctica en el sentido de tener que tomar en cuenta a cada momento la capacidad de acción-respuesta del enemigo, insertando esta mirada en la lógica de la guerra, por eso me parece que deberías leer a Clausewitz o los escritos militares de Mao. Si se hubierna seguido los lineamientos de Riazanov, durante la revolución bolchevique a mí no me quedan dudas de que esta hubiera sido aplastada durante la guerra civil, esto mismo la pasó a Allende en Chile , Riazanov en su momento proponía la “independencia” de los sindicatos, mirá lo que le hizo esa ilusa “independencia” de los sindicatos, como el de camioneros por ej., a Allende, y el caso de la Comuna de París con un modelo autogestivo reivindicado por Marx pero también reconociendo a su vez que no pudo durar ni por tres meses porque nunca llegó a hacerse con las bases del poder del Estado dejándolo casi intacto en manos burguesas y por eso fue aplastada por Thiers de la manera más cruel y contundente. Vos caes en una especie de fetichismo democrático o “democratismo” al creer que una masa sin conducción puede tener capacidad de derrumbar algo como el Estado burgués. No sólo es una falacia puramente idealista sino que ni siquiera eso es democracia, al contrario se caería en la dictadura de una sola persona, lo que se opone en soledad, y por tanto lo que decide una mayoría se descarta porque uno solo se opuso, no se puede organizar nada por unanimidad. Pero parece que lo tuyo no es la organización y su expresión, que es el partido. Lo que hacés es caer en una visión superidealista de creer que un ejército sin mandos coordinados y decisión centralizada puede lograr algo, un ejército sin conducción no sirve para nada, no se puede imponer nada desde una estructura débil, la burguesía utilizará todas tus debilidades para vencerte, justamente de lo que se trata es de no darle los espacios donde el enemigo gane la iniciativa, y aquí vuelvo a Clausewitz y y su teoría del encuentro. Cuando yo rescato ciertos análisis de Nietzsche o Foucault, no lo hago desde la postura idealista del primero y estructuralista y antidialéctica del segundo, los tomo desde sus conceptos más materialistas insertos en sus escritos, esto es, su análisis del Estado como garante de una sociedad divida en clases y organizada en torno a la propiedad de los medios de producción, y porque ellos analizaron muy bien los métodos de realización de ese poder, aunque las conclusiones de ambos estén mal dirigidas, de estos mecanismos de realización del poder el socialismo no podrá escapar, por eso es una transición, aún en él las clases siguen existiendo, la diferencia es que será la clase mayoritaria la que tendrá el poder y no la minoría explotadora, por eso subestimar a esta minoría explotadora creyendo que no hará nada para encontrar cualquier espacio abierto, aunque sea mínimo, que les pueda brindar la clase trabajadora en el poder para usarlos en nuestra contra es una postura ajena a la realidad material, justamente así es como recuperaría la clase dominante minoritaria su control ideológico. A veces digo que no sirve de nada tener un gran conocimiento del marxismo, un gran cúmulo de información, si no se lo sabe aplicar en la praxis, es en esta instancia experimental de confrontación con la realidad lo que demuestra al final de cuentas, si una ideología se sustenta o no.
Hay una frase de Marx en El 18 de Brumario… cuando critica el cretinismo parlamentario que se ajusta perfectamente a tu manera de pensar que dice: “una enfermedad que aprisiona como por encantamiento a los contagiados en un mundo imaginario, privándoles de todo sentido, de toda memoria, de toda comprensión del rudo mundo exterior.”
Pretender combatir al Poder desde un no-Poder, esto es, una masa sin organización, sin conducción, apelando sólo al espontaneísmo, al debate constante y las decisiones unánimes, sin nadie que organice y conduzca, es tan ilusorio como pensar que la guerra empieza en el ataque y esto no es así, el capitalismo avanza en su dominio y control político-militar y si no encuentra nada que lo detenga seguirá su camino de hegemonía, hasta que encuentre un verdadero contraPoder que lo confronte. Saludos.