Errores de previsión: Ante la ausencia de señales económicas reales (precios, en las economías capitalistas) el Estad carece de información fiable, por lo que no siempre acierta con sus decisiones.
En primer lugar, en el socialismo aún pervive en parte el mercado. Sí existen precios, indicadores de inflación, tipos de interés, balanza de pagos, etc. Es decir, en el socialismo no se acaba ni con los precios, ni con el comercio internacional (hay importaciones, exportaciones, déficit y superávit comercial), ni con la moneda, pueden pervivir determinados impuestos, etc. Por tanto, es absolutamente falso que el Estado carezca de información fiable. Otra cosa es que no siempre acierte con sus decisiones. Los planes pueden fallar, pueden acertar o pueden generar contradicciones, pero eso no quita que la planificación sea válida.
-Falta de incentivos: En la economía caitalista los empresarios, con el objetivo de ganar más dinero utilizan la tecnología más moderna e investigan. En la economía planificada, por el contrario, las empresas, aunque no sean rentables, no importa mientras cumplan los objetivos del plan.
En primer lugar, la competencia entre los capitalistas no siempre genera cambios tecnológicos, ya que puede resolverse con fusiones y adquisiciones de las empresas más débiles, y sobretodo depende mucho de la rama en cuestión. En una economía planificada, entre los objetivos del plan puede estar la inversión en tecnología más avanzada. Un clarísimo ejemplo de que la planificación socialista es capaz de generar tecnología son los primeros planes quinquenales soviéticos. En segundo lugar, decir que la economía capitalista es planificada... no es del todo cierto. La economía capitalista a nivel global es anárquica y caótica, no hay una planificación global, ni siquiera estatal o regional, salvo que el Estado pueda favorecer a algunas ramas o empresas, por la diferente relación de fuerzas entre los diversos sectores de la burguesía, o por presiones del proletariado, campesinado, etc. Otra cosa es que DENTRO DE UNA EMPRESA sí existe obviamente planificación. Y esa planificación es asombrosamente compleja y detallada en las empresas transnacionales. Pero a nivel global, la economía capitalista es todo lo contrario a la planificación. Aún así, no debemos olvidar una cosa, que el Estado tiene un claro carácter u orientación clasista, es decir, favorece a la clase dominante. En el capitalismo tenemos innumerables ejemplos de cómo el Estado cubre con sus pérdidas al capital, reprime las luchas, etc.
-La excesiva burocracia: Un potente aparato administrativo obstruye las peticiones de las empresas de todo tipo.
-Corrupción.
El socialismo lleva consigo un entramado administrativo complejo, obviamente, y eso va en sintonía con la complejidad que pueda tener la planificación socialista de la economía y por supuesto de la sanidad, educación, seguridad, etc. Todo ello requiere una potente armazón administrativa. Obviamente, el socialismo equivale a la dictadura del proletariado y este puede avanzar más o menos hacia la democratización, con el fin de que la planificación se acerque cada vez más a las necesidades de la población. Pero no debemos confundir burocracia con burocratismo. El burocratismo se da y se dio en los Estados socialistas, pero básicamente por herencia de los modos de producción previos. No es cierto por tanto que el socialismo favoreciera el burocratismo. Es más, hay ejemplos evidentes de lucha contra el burocratismo en la URSS, en China, en Corea del Norte, en Cuba, etc. El burocratismo se combate con la democratización del país y con la depuración o rehabilitación de aquellos que se dejan llevar por el burocratismo. En cuanto a la corrupción, es evidente que eso se va combatiendo con mayor eficiencia según se va desburocratizando y democratizando el socialismo, concienciando a la población, ejerciendo los castigos adecuados y sin demora (depurando y democratizando), etc. No se puede decir que en los Estados socialistas no haya corrupción, pero lo que sí se puede decir es que es mucho más fácil de subyugar y de aminorar que en los países capitalistas. ¿En qué países socialistas se han desarrollado mafias, crimen organizado, grandes fraudes del mismo calado que en los países capitalistas? En ninguno, al menos mientras han mantenido el sistema socialista.
-Se produce una menor variedad de productos que en el capitalismo. He utilizado los apuntes de economía de 1º de bachillerato porque reflejan bastante bien las críticas más comunes al sistema de economía planificada o socialista. Pretendo que refutéis y analicéis cada afirmación del texto que he puesto, valiéndoos de ejemplos prácticos y teoría económica, para que de esta forma, podamos mostrar el hilo a todos los defensores del mercado y no tener que andar refutando paso por paso.
No hay que dejarse llevar por los prejuicios. La variedad de productos en el capitalismo en muchos casos no es más que una farsa. En cuanto a la comida, lo importante es que sea de calidad. En los distintos países socialistas se producen los alimentos que resulte más fácil producir. No van a producir plátanos en Ucrania, por ejemplo. Se pueden fijar tratados comerciales entre la URSS y Cuba, para que lleguen plátanos a Ucrania, si los ucranianos se empeñan, pero hay frutas de sobra en Ucrania que pueden sustituir al plátano. Yo tampoco probé nunca la sopa de perro coreana, ni las serpientes vietnamitas, y oye, me entra la curiosidad por probarlas, pero tampoco me voy a quejar porque no se produzcan aquí.
Y en cuanto a la ropa, más de lo mismo. Pero eso no quiere decir que no haya en un país socialista talleres de serigrafía con los que pedir una camiseta con un diseño en particular, o que en los talleres textiles socialistas no se puedan fabricar camisetas de diferentes colores. Así que la diferenciación de productos en el socialismo es tan factible como en el capitalismo. Siempre, claro esta, de acuerdo con las posibilidades de los países. No le íbamos a exigir a la República Popular de Mozambique en sus inicios revolucionarios que construyera naves espaciales.